Colocar una silla mientras se espera el turno para comprar; evitar ruidos de contraste; etiquetar los productos con letras grandes; mostrar paciencia; facilitar el acceso al establecimiento... Gestos sencillos, en definitiva, que pueden contribuir a hacer más cómoda la vida cotidiana del colectivo de personas mayores. 34 locales comerciales y 13 hosteleros, agrupados en la asociación Aretxarte, se han sumado a la iniciativa Comercio Amigable con el objetivo de crear una red de establecimientos que proporcionan una experiencia de compra amable y amigable para las personas mayores del municipio.

Enmarcada dentro de las acciones que se vienen desarrollando desde la incorporación de Aretxabaleta a la red Euskadi Lagunkoia, esta iniciativa parte del grupo de trabajo formado en el seno de la asociación de jubilados y pensionistas Basotxo, que entre sus últimas reflexiones ha puesto el foco en el comercio local.

“Las personas mayores frecuentan el pequeño comercio y premian el buen servicio con su fidelidad. Es, por ello, que el comercio de proximidad es un aliado clave para hacer que las y los aretxabaletarras de más edad encuentren entornos amigables que hagan su vida un poco más fácil, además de poder ofrecerles apoyo en la compra y servir de catalizador de relaciones sociales”, expuso la edil de Gizartegintza, Karmele Uribarri.

Así, los comercios, servicios y bares participantes en este proyecto mostrarán el sello de Establecimientos Amigables como muestra de su compromiso en la adopción de una serie de prácticas que permitan mejorar la calidad de vida de las personas mayores.