El colectivo ecologista Eguzki acusa al Ayuntamiento de “mentir” y no retirar, tal y como había acordado, los residuos acumulados en el río “sin un coste elevado” gracias a las ayudas disponibles.

Eguzki recuerda que ha pasado casi ya un año desde que el gobierno y la oposición pactaron sendas partidas para los presupuestos de 2022, una de 25.000 euros para la limpieza el río Urola, y otra de 22.000 euros para poner medidas de prevención bajo la barandilla (rejillas). El consistorio no solicitó, sin embargo, las ayudas publicadas en febrero por la Diputación Foral de Gipuzkoa para la ejecución de actuaciones que contribuyan a la prevención y corrección de acumulación de basuras dispersas en entornos fluviales, costeros y terrestres.

En opinión de Eguzki, que interpeló varias veces el ayuntamiento y ha retirado durante este año cuatro veces los residuos del río, “ya tenían tomada la decisión que no iban a retirarlas, que no iban a gastar los 25.000 euros de la limpieza ni los 22.000 euros para colocación de las medidas de protección; que no iban a cumplir estos acuerdos. Y siendo esto así, es normal que no se soliciten las ayudas”.

Al respecto, consideran que ha quedado acreditada la “desafección medioambiental” del ayuntamiento, y creen que “hay que hacer hincapié en el papel que desempeña en una sociedad democrática el Código Ético y del Buen Gobierno en el que debe basarse un ayuntamiento: ejemplaridad, responsabilidad y buena fe, que debe ser un instrumento para aumentar la confianza entre electos y ciudadanos”.