Aunque la reparación de la presa neumática ya está realizada, un nuevo contratiempo se ha cruzado en el camino. El Ayuntamiento se ha visto obligada a posponer el inflado de la instalación para proteger el chorlitejo chico, especie de ave protegida, que se ha instalado y comenzado a reproducirse en la graveras que se han formado en el río Oria.

Tolosa retrasa el inflado de la presa neumática del Oria

Se ha constatado, por lo menos, la presencia de tres parejas de aves en la zona del puente Nuevo. “En una de las orillas viven y en la otra están poniendo huevos. Según su ciclo de reproducción, entre julio y agosto podrían hacer eclosión, pero después habría que dejar unos días para que puedan volar. Cuando a la naturaleza se le abre el camino, recupera el espacio que era suyo”, explicaba ayer el concejal de Medio Ambiente, Patxi Amantegi.

El sistema electrónico de la presa, averiado tras las inundaciones del pasado mes de diciembre, ya está reparado, por lo que el llenado de la instalación podría realizarse hoy mismo, pero ello conllevaría daños en la biodiversidad y el hábitat del río.

Desde que la presa se averiara, el Ayuntamiento de Tolosa ha mantenido varias reuniones con la Confederación Hidrográfica y la Agencia Vasca del Agua URA, tras las cuales se ha llevado a cabo el proceso de contratación de los trabajos de reparación a la empresa alemana Flecksmühle (Spare SA en España), encargada en su día de la construcción de la presa. La adjudicación ya sufrió un retraso en su momento porque la Confederación Hidrográfica se demoró en la emisión de un informe.

A causa del bajo caudal del río se han creado playas de grava y ha provocado la proliferación de chorlitejos chicos criando. Se trata de una especie catalogada como “vulnerable” en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas y en régimen de protección especial en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. La puesta en marcha de la presa supondría, de facto, la pérdida de huevos y crías que habitan en las graveras y está prohibido deteriorar y destruir los lugares de reproducción de aves protegidas.

“Debemos esperar a que finalice el periodo de reproducción y que el caudal de agua sea suficiente para poner en marcha la presa. No hay una fecha exacta, pero estamos realizando un seguimiento exhaustivo para tenerla operativa lo antes posible, ya que la actividad en el Oria, que es muy importante para Tolosa, tiene que continuar”, concluyó la alcaldesa de Tolosa, Olatz Peon. l