- Actualmente, los residuos depositados en el sistema de recogida neumática de Loiola y Riberas de Loiola se recogen al menos una vez al día, a primera hora de la mañana. El sistema se activa y lleva a cabo un fuerte aspiración, con lo que todas las bolsas de basura que han llegado en la jornada anterior a los buzones viajan por las tuberías hasta la central. Así lo explica el responsable de mantenimiento de la planta, Oscar Montilla, que señala que el sistema está totalmente automatizado y permite hacer nuevas recogidas en caso de necesidad.

Un sensor situado en cada buzón alerta cuando el contenedor subterráneo alcanza el 80% de su capacidad. De este modo, el programa informático decide si es necesaria una nueva aspiración y la programa para el mejor momento. "Se trata de recoger la máxima cantidad de basura con el menor gasto de electricidad", explica el técnico, que añade que aunque un depósito esté lleno a las 4.00 de la madrugada, por ejemplo, el programa no aspira automáticamente las bolsas, ya que estima en que el resto de la madrugada no se llenará más.

Aunque la recogida neumática ahorra dinero ya que no hace uso de camiones para recoger la basura por las calles, gasta también una importante cantidad económica en la energía necesaria para llevar a cabo las aspiraciones que trasladan las bolsas.