donostia - Cinco de las seis huertas profesionales acondicionadas por Fomento de San Sebastián en Altza para emprendedores siguen, de momento, vacías. El programa Urban Lur, que busca dar una salida profesional a donostiarras interesados (ofrece formación y ayuda en la comercialización de sus productos) fue presentado en febrero: durante el proceso de inscripción atrajo el interés de dos personas y solo uno de los dos proyectos ha sido admitido.

Poco después de presentar el nuevo programa arrancaron las obras para acondicionar las seis parcelas (con un coste de 240.000 euros), de entre 4.000 y 6.000 metros cuadrados de superficie y con un túnel invernadero en cada una de ellas, además de una pequeña caseta, un vallado de seguridad, suministro de agua y acceso para vehículos. Las instalaciones están acabadas y, aunque en su momento Fomento anunció que esperaba que estuvieran activas en mayo, siguen a la espera de inquilinos, con los terrenos y el interior de los invernaderos cubiertos de maleza.

Dado que de momento solo hay una solicitud admitida y quedan cinco parcelas vacantes, la Sociedad de Fomento mantiene abierta la inscripción en el programa para nuevos interesados.

parcelas Las parcelas están ubicadas en la parte trasera de Arriberri, en Auditz Akular: tres están junto al camino de Molinao y las otras tres, algo más cerca de las viviendas, al otro lado del paseo Felix Iranzo. En un principio, la intención de Fomento era que estas tres últimas se ubicaran también junto al camino de Molinao, en la campa de Eguzkitza, popularmente conocida como De las pistolas. Pero la asociación Altza XXI reunió más de 500 firmas de vecinos del barrio en poco más de una semana para exigir que se respetara esa zona, acondicionada como parque y espacio de ocio por los propios vecinos (en los últimos años con subvención municipal) y Fomento trasladó las parcelas.

El programa Urban Lur ofrece la cesión de las parcelas agrícolas por un periodo de tres años y durante el primero los adjudicatarios no deben pagar nada (durante los dos siguientes, el precio es de 350 euros mensuales). Además, antes de empezar a trabajar a los emprendedores se les ofrece una formación específica de manos de la escuela profesional Fraisoro, y formación empresarial. Asimismo, Fomento trabaja con pequeños supermercados y cadenas que pueden estar interesadas en la comercialización de sus productos (incluso se podría pactar con ellos la producción de manera previa para garantizar su venta), aunque siempre habría margen para la producción libre.

Además de dar una salida a emprendedores y personas en situación de desempleo (tienen prioridad, al igual que los proyectos impulsados por mujeres o que apuesten por la producción ecológica), el proyecto Urban Lur surgió también tras comprobar que solo el 3,75% de los productos de la huerta que se consumen en la ciudad se producen en Donostia. Por eso, el objetivo es impulsar esta actividad dentro del municipio y también el autoabastecimiento de verduras y hortalizas en mayor medida. La Sociedad de Fomento lleva más de cinco años diseñando el programa en el marco del clúster Guztiona pero, de momento, parece que la huerta no seduce demasiado a los donostiarras.