Benta berri acogerá un mural en recuerdo del cantante imanol
El Ayuntamiento de Donostia ha aceptado la propuesta del colectivo Imanol OroituzLa imagen será inaugurada el 11 de noviembre, cuando el artista habría cumplido 70 años, con un sencillo recital
donostia - La figura del cantante Imanol Larzabal, antiguotarra nacido en la calle Matia, estará para siempre en su barrio, según el acuerdo alcanzado recientemente entre el colectivo Imanol Oroituz, compuesto por músicos y amigos del fallecido, y el Ayuntamiento de Donostia. Un mural con el rostro del cantautor quedará pintado en una de las paredes de la plaza de Benta Berri, muy cerca de su casa natal, el día 11 de noviembre, la fecha en la que habría cumplido 70 años.
Un acto de inauguración sencillo, con su teclista Carlos Jiménez y tres canciones de Imanol interpretadas por Amaia Zubiria, acompañará la presentación del mural, en blanco y negro, sobre piedra rugosa oscura. La imagen pintada incluirá la leyenda: Zoaz urruti airean... lau haizetara.
La creación plástica correrá a cargo de la empresa Innovart, especializada en street art, así como en decoración de zonas urbanas. La firma también ha colaborado en ocasiones anteriores con el Consistorio, por ejemplo, en la creación del mural de la sede de los bomberos de Garbera.
La idea de crear un recuerdo perenne para el cantante surgió del grupo Imanol Oroituz, que ha organizado desde su fallecimiento distintos festivales musicales en honor del cantautor en la casa de cultura Lugaritz. Sin embargo, en esta ocasión, el colectivo deseaba dejar una huella visible para los donostiarras en un espacio emblemático. Personas que estuvieron vinculadas a Larzabal, como el citado Carlos Jiménez, el también músico Txema Garcés y los escritores Arantxa Urretabizkaia y Felipe Juaristi han empujado para que el homenaje anual que tributan al poeta y cantante se convierta en un recuerdo permanente.
“Fue este grupo el que presentó en el registro municipal la propuesta hace pocos meses”, explican desde el área de Cultura del Ayuntamiento. “Lo valoramos muy positivamente y hemos ido dando pasos adelante tras hablar con el departamento de Espacios Públicos para que nos dijeran qué puntos de la ciudad podrían acoger el mural. Nos han ofrecido distintas opciones y, en colaboración conImanol Oroituz y con el beneplácito de la familia, se ha elegido el de Benta Berri”, añaden. El espacio está muy cerca de su casa y de su calle. “Yo soy de la calle Matia”, solía recalcar el homenajeado, según recuerdan quienes le conocieron.
Fuentes municipales consideran que el lugar elegido para plasmar la figura de Imanol micrófono en mano es muy adecuado ya que la plaza de Benta Berri es un espacio abierto y limpio, con perspectiva para contemplar la imagen. Además, se ubica en un lugar muy concurrido, donde parte un ascensor público hacia la zona alta de El Antiguo y donde en el futuro se abrirá una boca de metro para la nueva estación de Benta Berri. De hecho, se prevé que la plaza quede cerrada por obras un temporada tras la inauguración del mural en recuerdo de Imanol. Su voz profunda, ahora muda, resonará en los corazones de quienes le escucharon, gracias a la imagen.
admirado El poeta y cantante euskaldun falleció en Orihuela (Alicante) a causa de un derrame cerebral en 2004, a los 56 años de edad, cuatro años después dejar Euskadi. Imanol fue un cantante admirado por distintos sectores tanto por sus canciones y su música como por sus posicionamientos políticos. Pero sus críticas a ETA tras el asesinato de Yoyes le valieron que un sector de la sociedad le tomase por traidor y las amenazas de muerte, insultos y críticas le quitaron las ganas de seguir en su tierra, según recuerdan algunos allegados. Imanol, en su juventud, había colaborado con ETA, lo que le llevó seis meses a la cárcel. Posteriormente, residió en Baiona, Burdeos y París, y volvió a Euskal Herria tras la amnistía de 1977.
Su figura estuvo envuelta también en la rocambolesca huida de los presos de ETA Joseba Sarrionandia e Iñaki Pikabea, que aprovecharon un concierto de Imanol en la cárcel de Martutene para escaparse en los altavoces del equipo musical.