Jose M. Sánchez es un joven emprendedor que se rige por la filosofía de que, con crisis o sin crisis, las cosas hay que sacarlas. Así, hace siete años comenzó su gran proyecto, Alkubi Lorategia. Este centro de jardinería y viveros de plantas no se lo ha puesto nada fácil.
Tras realizar unos cursos sobre agricultura consiguió la licencia urbanística correspondiente para comenzar el proyecto. Pero entonces llegó la crisis y necesitaba financiación. Con el optimismo que le caracteriza, Jose intentó poner a tres bancos de acuerdo durante todo un año, el 2009, pero fue imposible. Sin embargo, no se rindió y al final, una de las entidades, Caja Rural de Navarra, le dio un tercio de la financiación que necesitaba para poner en marcha el proyecto. Pero como todo en la vida, el dinero se acaba y hay que conseguir más. Y así, hasta tres veces.
Pero mereció la pena. Ahora, Alkubi es un lugar precioso y con unas vistas de escándalo. Sus instalaciones se componen de un edificio central donde se encuentran las secciones de decoración, floristería, plantas y una zona de vending. En el invernadero, que se encuentra junto al edificio central, encontramos desde plantas hasta todo tipo de contenedores (tiestos, jardineras...) pasando por abonos y áridos. Además, dispone de un total de 72 plazas de aparcamiento totalmente gratuitas.
Ante semejante inversión, la crisis y el mal tiempo; como complemento a la actividad principal, Jose se plantea habilitar los sótanos de los invernaderos para destinarlos a guardar autocaravanas y caravanas. Esta idea le vino al ver el gran problema que tiene Gipuzkoa con los aparcamientos de guarda y custodia de las mismas.
Este problema no es nuevo, viene de hace 25 o 30 años. El hecho de que no haya lugares para esto es normal ya que nos encontramos en una zona con una geografía muy irregular. Para poder hacer pabellones industriales, que es donde realmente deberían guardarse las autocaravanas, hay que hacer unos desmontes impresionantes y repercutirlo al costo euro/m2. Así, para poder guardar veinte vehículos de estos necesitaríamos 1.000 metros cuadrados, que costarían en torno a 900.000 euros, obteniendo a cambio una rentabilidad de 1.400 euros mensuales. Por lo tanto, el suelo industrial es totalmente inviable.
¿Dónde está el 80% de caravanas y autocaravanas guardadas? Donde siempre han estado, en zonas rurales. A raíz de una serie de denuncias que hubo en Donostia contra la gente que las guardaba, el Constistorio comienza a darse cuenta de que hay un problema. Un problema del que el propio Jose estaba al corriente y les hizo ver.
Ante el choque con la normativa existente, que no permite guardar autocaravanas en suelo rural, Jose solicitó reunirse con el concejal de Urbanismo. Este le atendió muy afablemente de una forma muy cercana y mostrando interés por el problema. En la segunda reunión, vieron que el problema era bastante más grande de lo que parecía en un principio y parece que el consistorio está por la labor de ir dando soluciones mostrando una muy buena atención para con la ciudadanía.
Alkubi plantea al Ayuntamiento poder guardar autocaravanas y caravanas en sus dos sótanos, que están totalmente habilitados para esta función ya que, entre los dos, pueden albergar 60 vehículos de este tipo. Además, cuentan con tomas de corriente, alcantarillas especiales para que puedan vaciar las aguas negras y grises, acometida de agua potable, sistema contra incendios, cámaras de videovigilancia y unos accesos muy amplios. Y todo, a un máximo de siete minutos de cualquier barrio de Donostia.
Con todo esto Alkubi Lorategia puede aportar parte de una solución que necesita Donostia. En esa dirección van.
Para poder regular la actividad necesitarían un plan especial. Ahora mismo están en ello y esperan que en el momento de presentarlo el Consistorio les brinde su apoyo y sigan con la buena sintonía para buscar soluciones que puedan beneficiar a los ciudadanos.