El centro tecnológico vasco Tekniker lidera un proyecto de la Agencia Espacial Europea (ESA) sobre sistemas electrónicos impresos en materiales flexibles para su uso en misiones espaciales, una tecnología que utiliza materiales de menos peso y permite abaratar los costes.

Los prototipos finales podrían ser aplicados en futuras misiones a la Luna y Marte, ha explicado este martes Tekniker en un comunicado.

La iniciativa denominada Printed Structural Electronics (SIPRES) tiene por objetivo desarrollar, fabricar y validar el uso de la electrónica flexible, impresa e híbrida con diferentes prototipos que sean capaces de operar en condiciones extremas de temperatura, vacío y radiación que exigen las misiones de investigación espacial.

Entre las posibles soluciones que se podrán llevar a cabo con esta tecnología se encuentran la integración de sensores de viento y humedad para "rovers" marcianos; sensores de radiación, temperatura y fotodetectores para la Luna; sensores de fuerza para mecanismos de naves espaciales y sistemas energéticos solares y térmicos para pequeños satélites de baja órbita, ha explicado el coordinador del sector espacial de Tekniker, Borja Pozo.

"Es la primera vez que la ESA experimenta con la aplicación de sistemas electrónicos impresos en materiales flexibles para su uso en el espacio", ha indicado

Tekniker elaborará los prototipos desde su fase de concepción hasta un desarrollo tecnológico más próximo a su introducción en el sector espacial.

En el proceso también participarán las ingenierías Alter Technology y CT Ingenieros-Cadtech mientras la impresión de los dispositivos y conjuntos electrónicos se llevará a cabo en el laboratorio de impresión 3D de Tekniker, en Eibar.

Una vez testeados y validados, los primeros demostradores tecnológicos podrían implementarse con plataformas nanosatélites empleadas habitualmente para la investigación en órbita terrestre baja (LEO) o en la verificación de la campaña de pruebas de la Estación Espacial Internacional (ISS).

La iniciativa SIPRES, que comenzará este mes de octubre y tendrá una duración de dos años, está financiada por la ESA dentro de su programa de desarrollo tecnológico TDE.