Tras una tarde de jueves en la que se recogieron alrededor de un centenar de carabelas portuguesas en aguas de la bahía de La Concha y la playa de La Zurriola, este viernes la tranquilidad ha vuelto a los arenales. Según ha informado el Ayuntamiento de Donostia, por el momento no se han avistado ejemplares, por lo que ondea la bandera verde en las cuatro playas: Ondarreta, La Concha, la isla y La Zurriola.
La tranquilidad reina también en la playa de Hondarribia y los arenales de Malkorbe y Gaztetape, en Getaria, donde también ondea la bandera verde.
Esta calma contrasta con la enorme actividad registrada la víspera, cuando las condiciones del viento y la marea trajeron consigo una llegada masiva de ejemplares a nuestras aguas. No obstante, el Ayuntamiento únicamente procedió a prohibir el baño en la playa de Gros, donde dos personas sufrieron sendas picaduras. En el resto de arenales se colocó la bandera amarilla y se pidió a los bañistas que disfrutaran del agua con precaución.