El Consejo de Gobierno de la Diputación de Gipuzkoa ha aprobado este martes el proyecto de rehabilitación estructural del puente situado en el punto kilométrico 444,793 de la N-I en Andoain. El presupuesto base es de 1.813.795,98 euros (21% IVA incluido) y el plazo de ejecución es de cuatro meses.

La portavoz foral, Eider Mendoza, en rueda de prensa, ha explicado que este puente fue levantado en 1976 y está compuesto por dos puentes paralelos de similares características. "Aunque desde entonces se han realizado las labores habituales de mantenimiento, ahora es necesario realizar una remodelación más profunda. Con esta obra prevemos, por tanto, mejorar la seguridad y comodidad de todas las personas usuarias de esta vía", ha señalado.

En concreto, este proyecto contempla la reparación de daños por durabilidad, el levantamiento del tablero para reparar los apoyos de media ladera y sustitución de elementos de apoyo, y actuaciones en la cara superior del tablero como fresado y demolición de las barreras, pretiles y recrecidos de hormigón, impermeabilización y reposición de firme, sustitución de juntas de pavimento y ejecución de nuevos pretiles de contención.

La portavoz foral ha apuntado que el proyecto "parte de la premisa de evitar al máximo las afecciones al tráfico". En este sentido, teniendo en cuenta que el izado del tablero para reparar los apoyos a media madera y sustituir los aparatos de apoyo requiere el corte de la calzada, se plantea la realización de los trabajos con by-pass durante todo el mes de agosto.

El resto de las actuaciones se prevé ejecutar mediante estrechamiento de calzada manteniendo dos carriles, realizando los cortes de carril necesarios en horario nocturno y by-pass en fin de semana.   

Accesibilidad

Por otro lado, la Diputación de Gipuzkoa sigue realizando mejoras en las entradas y oficinas de atención de los diferentes edificios que tiene. Así, en las últimas semanas se han instalado bucles magnéticos en los puestos de atención ciudadana del Palacio foral y Errotaburu para personas con discapacidad auditiva.

Para las personas con discapacidad visual, asimismo, se han colocado mapas de relieve y braille en las entradas de las oficinas de Hacienda, Txara y Palacio. "Estas medidas se suman a otras muchas que se vienen adoptando en los últimos años: códigos Navilens, marcas en el suelo, marcas en braille, vinilos de mayor contraste", ha añadido.

Mendoza ha incidido en que el objetivo "es mejorar la accesibilidad de las personas con diversidad funcional". "A la hora de tomar medidas se han tenido en cuenta las recomendaciones de las diferentes asociaciones sobre la accesibilidad de las instalaciones", ha señalado.

Finalmente, ha puesto en valor la colaboración de la institución foral con diferentes asociaciones, ya que las aportaciones que realizan "ayudan a la Diputación a avanzar en este ámbito". "La Diputación está apostando en los últimos años por un modelo de gobernanza abierto y colaborativo, porque estamos buscando soluciones compartidas para responder de forma más eficaz a nuestros retos como territorio", ha concluido Mendoza.