EH Bildu y Elkarrekin Donostia acusaron este martes al Gobierno municipal de Donostia PNV-PSE de retrasar intencionadamente la retirada de las piedras de Belartza. En concreto, EH Bildu dijo que el Ejecutivo de Eneko Goia hace "todo lo que está en su mano para dilatar el cumplimiento de la sentecia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco" en relación con la sentencia que obliga a retirar las piedras de Belartza.

Así lo manifestó el concejal Ricardo Burutaran después de que la Junta de Gobierno local aprobase este martes el proyecto para eliminar del espacio natural 120.000 metros cúbicos de las piedras depositadas en 2016 en la zona de Belartza Alto, procedentes de la excavación de la zona de la cantera, tal y como informó la pasada semana este periódico.

El documento técnico, redactado por Endara Ingenieros, recibió hace un año el visto bueno de los técnicos municipales, según el corporativo de EH Bildu, que recordó que ahora, una vez aprobado por la Junta de Gobierno el proyecto de eliminación, es necesario aprobar el pliego de condiciones del concurso y adjudicar la "retirada efectiva del mencionado depósito ilegal" para que se cumpla lo establecido por los tribunales.

Por su parte, la concejala de Elkarrekin Donostia, Haizea Garay, criticó que el gobierno municipal "no concreta un plazo para la retirada de los vertidos ilegales en Belartza" y señaló que el proyecto aprobado no fija un gestor de residuos ni se refiere a los vertidos posteriores a 2016 en la zona. "El gobierno municipal ha retrasado su ejecución casi tres años y aún hoy siguen sin confirmar cuándo van a retirar las piedras", añadió.

"Hay serias dudas sobre el proceso que se va a llevar a cabo", dijo Garay, que recordó que las piedras ilegales llevan seis años en el lugar.

El alcalde, Eneko Goia, por su parte, recordó que después de que los tribunales diesen la razón en 2019 a Haritzalde y otros colectivos que calificaron de ilegal el vertido de tierras en Belartza, el Ayuntamiento inició el proceso para su eliminación. "Hemos hecho muchas requisitorias a la propiedad para que procediera y la falta de respuesta ha llevado al Ayuntamiento a redactar un proyecto de ejecución con vocación de ejecutarlo y después cobrárselo a la empresa", dijo el mandatario del PNV.

Asimismo, dijo desconocer si la empresa responsable del vertido acudirá a tribunales para evitar quitar las piedras, una actuación que tienen un coste de más de 1,2 millones de euros.

De hecho, abogados de la sociedad anunciaron en un encuentro abierto en el Ayuntamiento que la intención de la empresa era mantener en el lugar los restos de excavación ya que servirían después para la ejecución del futuro centro comercial e industrial previsto en Belartza Alto.