Pese a la jornada veraniega que se está viviendo en todo el territorio, las nubes bajas están provocando que la situación en la costa sea más fresca, hasta cinco grados menos, que en el interior.Basta con comprobar los termómetros para darse cuenta de que, en los apenas 8 kilómetros que separan Donostia de Lasarte-Oria, la diferencia es considerable: mientras que en el municipio de Buruntzaldea los mercurios marcan los 25,2 grados, en la capital se quedan en los 20.

También cobra protagonismo en la costa el viento, que sopla del noroeste, lo que hace que la sensación de calor sea menos acusada que en el interior.

Esta situación veraniega, sin embargo, se verá interrumpida en las próximas horas, y es que la Agencia vasca de Meteorología Euskalmet pronostica para mañana un cambio en la situación. Así, pese a que el día amanecerá soleado, por la tarde aumentará la inestabilidad. “En el cielo pocas nubes por la mañana, con algunas brumas a primeras horas en puntos de costa. Por la tarde, en cambio, crecerá nubosidad de evolución y no se descartan chubascos tormentosos por la tarde-noche, especialmente en zonas de la mitad sur”, avanzan.

La inestabilidad irá en aumento y ya el jueves será una jornada más nubosa en los que no se descartan chubascos tormentosos en las últimas horas del día o incluso de madrugada. Para ese día, pese a que el viento soplará del sureste, las temperaturas descenderán ligeramente.