Al igual que está sucediendo en el conjunto de la sociedad, el impacto de la sexta ola. En este momento, la red de residencias cuenta con 265 positivos activos en 26 centros, lo que supone una reducción de 134 casos y 5 residencias menos que hace una semana.

Así lo ha hecho saber la portavoz foral, Eider Mendoza, este miércoles, que ha informado de que en los últimos siete días han fallecido cuatro personas, 330 se han curado y se han diagnosticado 200 nuevas infecciones.

Del total de personas afectadas por la covid-19, 104 se encuentran en los centros de referencia habilitados por la institución foral.

La sexta ola se ha cobrado, por el momento, la vida de 37 residentes, mientras que 1.707 usuarios han superado la enfermedad desde el 29 de noviembre.

En lo que respecta al personal, a día de hoy hay 135 positivos activos (56 menos que la semana pasada) en 39 residencias diferentes.

La Diputación está llevando a cabo un "gran esfuerzo" en la detección de casos, una estrategia "clave para evitar contagios". Así, en la última semana se han realizado 3.178 test, (2.039 PCR y 1.139 PCR de saliva), lo que supone una media diaria de 454 pruebas. Desde diciembre, se han llevado a cabo 38.580 pruebas de detección.

En lo que respecta al conflicto laboral de las trabajadoras de las residencias, Mendoza ha vuelto a emplazar a la patronal y a los sindicatos a que se sienten a negociar la reivindicación salarial de las trabajadoras. Ha señalado que, la Diputación, como parte contratante, prioriza y priorizará que se preste "el mejor cuidado posible a los usuarios en este momento delicado de la pandemia".