Unas aparatosas imágenes del autobús urbano eléctrico de Tolosa siniestradourbano eléctrico de Tolosa siniestrado frente a la pastelería Eceiza en la calle Rondilla comenzaron a circular a primera hora de la mañana de ayer. Faltó tiempo para que también empezara a hacerse viral el vídeo que narraba in situ A pesar del shock, todo quedó en un susto y no hubo que lamentar heridos. “No sabemos qué ha pasado; el autobús no paraba, solo ha parado cuando nos hemos empotrado contra la pastelería Eceiza”, explicaron los usuarios del servicio.

El accidente ocurrió pasadas las 8.30 horas. El vehículo venía desde Larramendi para realizar su parada habitual en la escuela de música, pero no pudo detenerse y chocó contra dos buzones de Correos y una señal de información, para estrellarse posteriormente contra la puerta de la pastelería Eceiza y el portal del número 34 de la calle Rondilla.

Eva Munduate se sube todos los días a ese mismo autobús en la gasolinera Arriaran. Ayer también lo hizo. “Me estaba dando cuenta de que el autobús no paraba en la escuela de música, que se estaba pasando de largo, y para cuando nos hemos dado cuenta ya nos habíamos empotrado contra Eceiza. Fue un golpe seco”, explicó a este periódico la usuaria del bus.

La suerte quiso que el vehículo no estuviera muy lleno y que tampoco hubiese mucha gente en la calle. “Íbamos pocos, seis o siete críos que iban a la ikastola y dos adultos. El interior del autobús se llenó de cristales. Lógicamente, los chavales se pusieron histéricos y los cobijaron en Eceiza”, relató.

Se desconoce qué pudo suceder. “Lo primero que miré fue que estuviera bien el conductor. No reaccionaba, estaba paralizado, pero no le había pasado nada: se echaba las manos a la cabeza”, detalló Munduate que, tras comprobar que la cosa no había ido a mayores, inició el camino a pie hacia Amaroz, todavía con el susto en el cuerpo.

Hasta la zona se desplazaron varias ambulancias, bomberos, efectivos de la Policía Local y de la Ertzaintza, aunque no fue necesario atender a ninguna persona. El conductor fue sometido a las pruebas habituales y dio negativo en todas ellas.

El Ayuntamiento de Tolosa está analizando lo ocurrido, ya que el autobús, fabricado por Irizar e-mobility y que circula en Tolosa desde el pasado mes de julio, está monitorizado y, por tanto, se podrá conocer qué ha fallado para que no vuelva a ocurrir nada parecido. Las primeras hipótesis apuntan a un fallo eléctrico o en los frenos.

A lo largo de la mañana se reanudó el servicio con el autobús de sustitución. Hasta que el Hiribus eléctrico se repare, el servicio se ofrecerá por medio de dicho vehículo.