"La labor de Aleson y Morcillo a favor de la diversidad funcional es impagable"

- El azkoitiarra Imanol Aleson y su compañero de equipo en pruebas de ultratrail, el madrileño Julián Morcillo, culminaron el pasado domingo el exigente reto bautizado como GR11Urdina, que consistía en enlazar el Cap de Creus (Girona) y el cabo Higer (Hondarribia). En apenas trece días, los ultrafondistas completaron 800 kilómetros superando un desnivel acumulado de 56.000 metros; una auténtica "locura" que llevaron a cabo para visibilizar los diferentes tipos de diversidad funcional y promover la integración de las personas que padecen alguna de esas enfermedades.

Así, Aleson y Morcillo dedicaron cada una de las doce primeras etapas a un tipo de diversidad funcional (desde la sordera, el autismo, la parálisis cerebral o la artritis idiopática hasta diferentes síndromes como los de Duchenne, Goldenhar, Down o Angelman), mientras que la decimotercera estuvo dedicada al resto de diversidades funcionales.

Los protagonistas de la GR11Urdina culminaron su reto exhaustos por el esfuerzo realizado y muy emocionados y el próximo viernes verán reconocida su aportación para visibilizar los diferentes tipos de diversidades funcionales con un acto organizado por la asociación Marea Urdina en la sala Baztartxo de Azkoitia (será a las 19.00 horas y abierto a todas las personas interesadas).

Desde Marea Urdina, Aritz Orbegozo asegura que el trabajo que han realizado Aleson y Morcillo a favor de la integración de las personas con diversidad funcional es impagable: "Se han volcado para sacar adelante este durísimo reto y estamos enormemente agradecidos y orgullosísimos de que dos atletas con un palmarés como el suyo hayan querido ser nuestro altavoz", señala.