no de los mayores retos de todos los ayuntamientos es el de dar una buena atención a la ciudadanía, identificando y solventando sus necesidades sociales de la manera más inmediata posible, con el objetivo de que puedan vivir en unas condiciones óptimas y desarrollar su proyecto de vida.

En esta línea, Beasain lleva años trabajando y adelantándose a las situaciones que puedan surgir en el futuro. Precisamente para ello, el Consistorio dará uso a tres de las viviendas de propiedad municipal a fin de atender diversas necesidades sociales del municipio

El convenio firmado recientemente con la Diputación Foral de Gipuzkoa tiene como objetivo poner a disposición una serie de viviendas mediante las que facilitar el tránsito a la edad adulta de personas jóvenes que, hasta el momento de cumplir la mayoría de edad, estaban tuteladas por el ente foral. En concreto, Beasain dará este uso a dos viviendas que están situadas en la calle Bista Alai.

Además, una tercera vivienda, que está situada en Oriako pasealekua, servirá para como recurso para personas sin hogar y que necesiten un alojamiento temporal.

La cesión y uso de estas tres viviendas se sitúa dentro de los programas específicos que desarrolla el Departamento de Política Social de la Diputación Foral de Gipuzkoa y sus destinatarios contarán en todo momento con el apoyo y supervisión de profesionales, ya que es un servicio que da respuesta a una necesidad, y no es un capricho o una ventaja a la que tendrán acceso.

En dos de las viviendas se desarrollará el proyecto GazteOn Sarelan. Este programa es una iniciativa que quiere facilitar el salto a la edad adulta de las y los jóvenes que han estado bajo tutela de la Diputación Foral y que alcanzan la mayoría de edad.

Desde un punto de vista de intervención social consideran que es "necesario" realizar un proceso de desvinculación partiendo de los procesos de protección que permita un adecuado tránsito bien hacia la reunificación familiar o bien hacia la emancipación funcional.

"No cabe duda de que aun cuando la edad legal de la mayoría de edad se sitúa en los 18 años, a esa edad no se encuentran suficientemente desarrolladas las habilidades personales y sociales para una vida autónoma y sin acompañamiento de adultos de referencia", destacan desde el Consistorio.

El objetivo es que, cuando estas personas cumplan 18 años y sean mayores de edad, momento en el que la Diputación Foral de Gipuzkoa pierde la tutela, sean atendidas en un recurso que respete su independencia y autonomía para realizar el tránsito al mundo adulto con el máximo apoyo y supervisión de los profesionales.

El programa realiza una sólida apuesta por la empleabilidad de las personas usuarias, fundamental para el éxito de este proceso de maduración. Así, este programa está dirigido a menores de entre 16 y 18 años tutelados, y podrán participar en el mismo hasta que cumplan 23 años.

En la tercera vivienda, en cambio, el departamento de Política Social tiene previsto desarrollar el programa Hábitat. Este programa pionero incorpora en al territorio histórico de Gipuzkoa el modelo Housing First para personas sin hogar. Este modelo tiene como premisa facilitar la vivienda y proporcionar profesionales de apoyo. Se trata de un recurso de baja exigencia en el que el usuario se compromete a participar en el proyecto.

Estas casas que dan respuesta a las necesidades sociales son primordiales. A comienzos de este mismo año, el Ayuntamiento de Ordizia anunciaba la adaptación de un piso para emergencia social. "Es propiedad del Ayuntamiento pero estaba sin uso. Ahora se utilizará para dar respuesta a las situaciones de emergencia que puedan surgir", destacó en la visita a la vivienda la concejala de Bienestar, Educación e Igualdad, Ainhoa Jimenez.

Esta vivienda no es como las que se han adecuado en Beasain, ya que será utilizada solamente para casos de emergencia. De hecho, salvo en circunstancias especiales este servicio se limitará a facilitar el alojamiento, no ejerciéndose tutela alguna y sin personal al cuidado de las personas acogidas, si bien se hará un seguimiento de la situación que ha llevado a ocupar la vivienda y del plan de intervención correspondiente desde el departamento de Servicios Sociales El uso de la casa no será ilimitado: con carácter general, la duración podrá ser de cuatro meses contados a partir de la fecha de entrada.

Mediante estas iniciativas se quiere poner el foco en el bienestar de la ciudadanía para tratar de que los más vulnerables consigan hacer de estas viviendas un hogar.

Dos de las viviendas, que se encuentran en la calle Bista Alai, serán destinadas al tránsito a la mayoría de edad de jóvenes tutelados

La tercera vivienda será utilizada como recurso para las personas sin hogar y se encuentra en Oriako pasealekua