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En lugar de pistolas, más agentes

EH Bildu de Arrasate propone un modelo de proximidad de la policía local, que incluye la figura del agente de barrio

En lugar de pistolas, más agentes

La controversia en torno a la posibilidad de armar a la Policía Municipal de Arrasate se reavivó a primeros de año tras la sucesión de diferentes hechos violentos. Aunque la demanda viene de tiempo atrás, fue en enero cuando la jefatura de la Guardia Urbana reclamó por escrito que se dotara al cuerpo de armas de fuego “para la seguridad de los agentes y de la propia ciudadanía”.

Sin embargo, desde el grupo municipal de EH Bildu rechazan que los policías locales lleven pistola y abogan por poner en marcha un modelo propio basado en la Policía de proximidad, también denominada comunitaria, que implica un aumento en el número de efectivos, además de constituir una comisión de seguridad y protección civil, e implantar la figura del agente de barrio.

La resolución sobre la equipación con armas recae en la alcaldesa, María Ubarretxena, que el mismo mes de febrero requirió a la jefatura del cuerpo policial que en el plazo de seis meses reportara los datos de las actuaciones realizadas en los últimos cinco años para poder valorar “la evolución de la criminalidad”, antes de tomar una decisión al respecto. Será con este informe sobre la mesa, que deberá estar listo para julio, cuando la primera edil requerirá a los partidos políticos y sindicatos con representación en el Consistorio (LAB y ELA) que se posicionen en este debate. No obstante, la regidora arrasatearra ha manifestado en más de una ocasión que no armará a la Policía Local si no es con el consenso de las fuerzas políticas municipales.

agentes especializados En este contexto, EH Bildu ha presentado una propuesta como alternativa a las armas, que según explicó el portavoz Eneko Barberena, han trasladado a los agentes de la Guardia Urbana -no todos están a favor de portar pistolas-, y al comité de empresa del Ayuntamiento que preside LAB.

La coalición soberanista apuesta por un modelo apoyado en la Policía de cercanía, cuya función es articular la prevención en seguridad ciudadana a través de distintos mecanismo como el diálogo.

Plantea, de esta manera, especializar y organizar a los agentes de acuerdo a sus atribuciones: tráfico y seguridad vial, violencia machista, el servicio de grúa y OTA, protección civil, atestados?, así como crear la figura del policía de barrio. Estos últimos serían “un referente” para los vecinos en sus respectivas zonas residenciales, y se ocuparían de acercarse a ellos, tomar nota de sus inquietudes y demandas, mediar en la resolución de conflictos, solucionar problemas de tráfico...; en definitiva, actuar como intermediarios entre los vecinos y el Consistorio.

La incorporación de estos policías de barrio sería uno de los motivos del incremento del número de efectivos, que actualmente es de 32. “Nuestra idea es que ronden los 40 agentes”, apuntó Barberena. Así, en el modelo organizativo esbozado por EH Bildu no tienen cabida las armas de fuego ni tampoco las pistolas eléctricas (Taser). Al contrario, entienden la seguridad en términos de un aumento gradual de la plantilla de policías locales. “Estamos convencidos de que el mejor modo de garantizar la seguridad de los agentes es completar cada turno de trabajo con un número suficiente de efectivos, que puedan hacer frente de forma adecuada a sus actuaciones y a las situaciones conflictivas”, recalcó Barberena.

En este punto, defienden la creación de una bolsa de contratación donde el Consistorio fije sus propios criterios, en lugar de que la selección de los agentes se haga por medio de Arkaute, como ocurre ahora.

comisión y consejo EH Bildu propone, asimismo, una estructura de funcionamiento encabezada por una comisión de seguridad ciudadana y protección civil que integrarían los partidos políticos, el jefe de la Policía Municipal y los cabos, y que haría un seguimiento a las situaciones que alteran la convivencia (xenofobia, drogas, delincuencia?). Este foro se completa con un segundo, el consejo local de seguridad, en el que también participarían el comité de empresa, los alcaldes de barrio, técnicos municipales, el consejo escolar, los comerciantes y agentes sociales, entre otros.