zumarraga - Un objeto adquiere mayor valor cuánto más utilidades se le dan. Aparentemente, un alargado trozo de madera no es gran cosa, pero el ser humano lo ha convertido en su más veterano y fiel compañero de viaje. Partiendo de esa reflexión (o una parecida) el artista zumarragarra Koldo Cadierno abrirá el jueves que viene la exposición Elogio al bastón. En la misma se pueden ver una serie de pinturas hechas al estilo oriental, con el bastón como gran protagonista. Las pinturas están acompañadas por textos.

El propio Cadierno explica que la exposición tiene dos lecturas. “Por un lado está el bastón como metáfora del camino y el camino como metáfora de la vida. Por otro lado, el bastón es probablemente la primera herramienta que inventó el ser humano. Eso sí, seguramente será una herramienta anterior al ser humano: lo utilizaría también alguna otra especie anterior”.

El autor recuerda, además, que a los palos se les han dado múltiples usos desde hace siglos: como mango de las azadas, como remos...

En algunos de los dibujos de la exposición aparece también la calabaza vinatera: otra herramienta primitiva que ha ayudado desde tiempos inmemoriales a hacer el camino. “Según los antropólogos, pudo ser una de las primeras plantas domesticadas por el hombre. Se utiliza para transportar líquidos, por lo que al igual que el bastón, habla del viaje”.

El bastón, el viaje, la reflexión acerca de la vida... son temas recurrentes en la pintura zen desde hace miles de años. El artista zumarragarra utiliza esta técnica a menudo y es la que se puede ver en los trabajos de la exposición. Ha utilizado tinta y trozos de papel y cartón que le han dado sus amigos y familiares. “He intentado seguir la tradición de la pintura oriental, que está basada en la simplificación de la pincelada”.

A Cadierno le gusta pasear por el monte y, como es de suponer, utiliza bastón. “Dos días después de poner título a la exposición, me hice un esguince y tuve que utilizar un bastón. No sé aquel accidente tuvo algo que ver con la muestra, pero así sucedió”.

La exposición de Cadierno, además de para ofrecer un merecido homenaje al bastón, sirve para hacer una parada en el camino y reflexionar sobre el valor de las cosas aparentemente simples y lo que nos ofrece la naturaleza.

La exposición permanecerá abierta hasta el día 9 de octubre. La sala de exposiciones de la casa de cultura Zelai Arizti de Zumarraga abre sus puertas de lunes a viernes de 17.30 a 20.30 y los sábados y domingos de 12.00 a 14.30 y de 16.30 a 18.30.