Los alumnos de Bachiller del colegio Marianistas, actualmente denominado Summa Aldapeta, pasarán un par de cursos fuera de sus instalaciones, según los planes del centro escolar, que planea la reconstrucción íntegra del tradicional colegio donostiarra para su modernización total, emprendida hace unos años.
El colegio, que abrió sus puertas en 1887, ha elegido Villa Asunción, situada junto al colegio del mismo nombre, en el Alto de Miracruz, para ubicar en ella su sucursal provisional mientras duren las obras de reconstrucción del edificio. “Los alumnos, unos 400, podrá ir a diario en autobuses que saldrán desde el actual colegio”, explicaron a este diario fuentes de la dirección de Marianistas, que recordaron que los alumnos de Bachiller, además, son suficientemente mayores para acudir en transporte público si lo desean. “Es una ubicación muy bien comunicada, ya que no solo tiene autobuses que paran en frente, sino también la estación del tren de Intxaurrondo y el Topo de Herrera, que está a una distancia similar a la que tiene la estación de Easo del edificio de Aldapeta”, añadieron.
El edificio de Villa Asunción es propiedad de la Diputación de Gipuz -koa, que ha sacado a concurso el alquiler del edificio para uso docente, con el fin de que los Marianistas puedan presentarse a la licitación y, así, cumplir con el plan previsto, además de con los trámites legales. Así, si no hay contratiempos, el alumnado de Bachiller podrá recibir sus clases en este inmueble a partir del próximo curso.
El edificio de Villa Asunción acogió la primera Escuela de Trabajo Social de Donostia y, más adelante, fue el germen de la actual Escuela de Arquitectura, posteriormente ubicada en el campus de Ibaeta. En la actualidad es propiedad de la Diputación y ha acogido usos relacionados con la UPV.
Reconstrucción
Por su parte, el edificio del colegio Marianistas, actualmente denominado Chaminade, comenzará a ser derribado en junio, según el calendario previsto. En la misma parcela se construirán 60 viviendas de precio libre, con cuyas ganancias se financiará la operación. Junto a ellas, el edificio del colegio tendrá planta en forma de L y capacidad para 1.600 alumnos.
Con la obra se transformará también la zona deportiva, que seguirá teniendo canchas de baloncesto, fútbol 7, fútbol sala, voleibol y bádminton. Además, se habilitará un campo de hierba artificial y pistas deportivas.
La reconstrucción del edificio Chaminade sigue la senda emprendida hace unos años con la ejecución de un nuevo inmueble para sustituir al de San Bartolomé, dentro del mismo complejo Summa Aldapeta. A finales de 2012 abrió sus puertas la nueva construcción Lestonnac, con seis plantas, que han sido destinadas a los alumnos más jóvenes del colegio católico.