donostia - Las dos plantas de estacionamiento público de la estación de autobuses de Atotxa quedaron abiertas a primera hora de la tarde de ayer, tras obtener el último permiso municipal para iniciar esta actividad. El nuevo parking hace el número 16 de la capital guipuzcoana y suma 384 plazas (187 en la primera planta y 97 en la segunda) en el centro de la ciudad, junto a las estaciones de trenes y de autobuses. Esta última se pondrá en marcha próximamente, aunque aún no tiene fijada una fecha concreta. A pesar de ello, todas las partes pretenden que sea una realidad antes de fin de año.

Tras la apertura del estacionamiento, ayer entraron en él los primeros coches, que dispusieron de las dos primeras horas gratis, una promoción que se alargará durante el primer mes de funcionamiento de la nueva infraestructura. Además, quienes acudan a llevar o recoger viajeros de los autobuses dispondrán también de un cuarto de hora gratuita en este parking.

Las tarifas del nuevo estacionamiento corresponden a las de la zona roja de Donostia, más barata que la especial y más cara que la verde. La primera media hora cuesta 1,30 euros; una hora, dos euros; hora media, 2,90, y dos horas, 3,75.

Por lo demás, tanto la empresa gestora como el Ayuntamiento ultiman los últimos flecos para que la estación de autobuses pueda abrirse lo antes posible. Ayer estuvieron practicando pruebas tres vehículos de Lurraldebus y hoy volverán a realizarse simulacros de funcionamiento para ir avanzando en los permisos necesarios.

acceso cómodo El primer autobús que entró en la nueva terminal fue un vehículo de Pesa, cuyo chófer señaló posteriormente que el acceso, a pesar de ser en curva, era cómodo.

El coste del edificio subterráneo, proyectado por el arquitecto Javier Abal, será finalmente de 21 millones de euros, algo menos que lo inicialemente previsto, ya que la construcción dispone de una planta menos de lo inicialmente dibujado.

Las instituciones ponen parte de esta cantidad. En concreto, el Ayuntamiento aporta 8,7 millones de euros y la Diputación, seis. El resto corre a cargo de la UTE liderada por Murias que, a cambio, explotará la infraestructura de transporte así como el estacionamiento durante los príximos 50 años.