donostia - El Gobierno municipal desbloqueará la venta del edificio de la plaza Lasala el próximo martes, al aprobar en la junta de gobierno la cancelación de una cláusula que paralizaba la situación. La anulación de una cláusula vigente en el convenio de permuta de fincas del Gobierno Vasco liberará el traspaso de este inmueble a su nuevo propietario, la empresa SADE.

En 2008, el Gobierno de Odón Elorza y el Gobierno Vasco firmaron un acuerdo en el cual el Ejecutivo de Gasteiz adquiría una parcela en Riberas de Loiola a cambio de la cesión al Ayuntamiento de Donostia de los edificios de su propiedad ubicados en la plaza Lasala y Maldatxo Bidea, en Egia. Así, para garantizar la edificabilidad del terreno, se incluyó una cláusula sobre el edificio de plaza Lasala, impidiendo su venta si el Ayuntamiento de Donostia no permitía construir en la parcela de Riberas de Loiola. No obstante, el Gobierno municipal de Bildu sacó a la venta en enajenación el edificio de plaza Lasala, traspaso que no se pudo materializar por la vigencia de dicha cláusula.

“Esta cláusula era una espada de Damocles en el contrato de venta del edificio, algo que el anterior Gobierno municipal ya conocía sin haber hecho nada. Nos encontramos ante una situación embarazosa, con un concurso realizado, una enajenación realizada, unos derechos adquiridos por la SADE, y con la imposibilidad de poder entregar ese edificio”, apuntó ayer Ernesto Gasco, alcalde en funciones durante estos días.

“Vamos a modificar las cláusulas de la permuta para poder vender el edificio de la plaza Lasala, en el plazo asignado, para que así la SADE pueda pagar los 14 millones de euros a los que se comprometió en la adquisición del mismo”, anunció Gasco.

Además, en el concurso de enajenación se señalaba que el Ayuntamiento tenía como plazo cuatro meses, desde el 4 de junio al 4 de octubre, para poder realizar la estructuración. Por esta razón el Ejecutivo municipal ha procedido a una negociación y al acuerdo con el Gobierno Vasco para “cambiar dicha cláusula del convenio por una indemnización”.

Para ello, la Junta de Gobierno aprobará este martes la cancelación de la cláusula vigente que afecta tanto al edificio de plaza Lasala, como a la parcela de Riberas de Loiola y a Maldatxo Bidea. “De esta manera al Gobierno Vasco se le garantiza que va a poder seguir construyendo esa parcela para su edificio de oficinas, y si en algún caso se le impidiera construir, se le indemnizaría con 13,7 millones de euros por el daño que se le provocaría”, completó, importe que equivale al valor de la parcela de Riberas de Loiola

“En definitiva, el Gobierno municipal PNV-PSOE ha conseguido desbloquear un escenario que podría habernos llevado a una situación no deseada, al tener que devolver a su antiguo propietario el edificio de la Parte Vieja” señaló el concejal donostiarra.

Asimismo, recordó que el actual Plan General de Ordenación Urbana vigente mantiene la calificación como equipamiento comunitario para la parcela de Riberas de Loiola, permitiendo construir 25.000 metros cuadrados sobre restante y cuatro plantas de aparcamiento. En el edificio de la plaza Lasala, la nueva propiedad tiene pensado habilitar un hotel de 71 habitaciones, que generará 34 nuevos puestos de trabajo.