Donostia - El Gobierno Vasco ratificó ayer la declaración de conjunto monumental para el parque de atracciones de Igeldo y su funicular, que obtuvieron hace más de un año la categoría de bien cultural.
El concreto, el Consejo de Gobierno aprobó no admitir el recurso que había interpuesto la sociedad propietaria del parque de atracciones y el funicular, Monte Igueldo SA, que se considera perjudicada por la catalogación de monumento, que le supone un mayor gasto económico y le impide llevar a cabo determinadas reformas que podría ejecutar en caso de que el espacio no fuera considerado monumento.
La catalogación del entorno fue decretada en mayo de 2014 después de casi un año de tramitación del expediente abierto con el fin de proteger el conjunto centenario, abierto al público en 1912.
El expediente comenzó a ser analizado tras las polémicas surgidas en torno a la posible transformación del funicular para su modernización, que provocó una recogida de firmas contrarias a que los vagones perdiesen su característica estética de madera. En concreto, el Ejecutivo autónomo recibió unas 3.800 firmas para pedir la máxima protección para el funicular de Igeldo, el más antiguo de Euskal Herria y el tercero más antiguo del Estado español.
Pero el decreto no se quedó en proteger el característico transporte que lleva hasta la zona de ocio, con su trazado, la maquinaria, los vehículos y las dos estaciones. También incluyó dentro del conjunto monumental el propio parque con el entorno urbanizado que lo circunda. El decreto también afecta al torreón que corona la cima del parque y otros elementos antiguos como las barandillas de fundición, la fuente y los anuncios antiguos que pueden observarse en algunos lugares. También forman parte del conjunto monumental las atracciones clásicas como el Río Misterioso, la Montaña Suiza y el Lago de las Barcas.
modernización Por otra parte, el Gobierno Vasco informó el pasado mes de enero de que está preparando un concurso público para abordar la modernización del funicular, aunque manteniendo la estética antigua que posee. Según señaló entonces, la tarea estaría finalizada en unos meses.
Numerosas infraestructuras similares repartidas por Europa han mejorado sus instalaciones manteniendo los funiculares con sus estéticas tradicionales, aunque mejorando sus sistemas internos con tecnologías actuales.