Tolosa - Desde su privilegiado mostrador, Edorta Jauregi ha podido observar los cambios que ha habido en la confección de los disfraces de Carnaval. Lleva trabajando en el negocio familiar, la tienda de telas El Kilo de la calle Mayor, alrededor de 30 años, y asegura que en Tolosa “la gente sigue haciéndose un disfraz nuevo todos los años”.

¿Cuándo empieza la temporada de Carnaval?

- Para finales de octubre o principios de noviembre ya se suele empezar a mover la gente. Las cuadrillas grandes suelen andar con tiempo, porque quien tiene que vestir a 500 chavales necesita tiempo obligatoriamente. Pero, hoy mismo he vendido tela para hacer un iceberg, que tendrán que construirlo en una semana. Hay de todo, pero en el último momento se suele vender mucho para hacer detalles a las carrozas o completar el traje: se vende tela hasta el Sábado Regular.

Son días de locura, ¿cómo los vive?

- Lo más bonito de este trabajo es la temporada de Carnaval; te ríes más y la gente está muy alegre. Suelen ser ventas más divertidas y hay más cachondeo.

¿La gente sabe lo que quiere?

-Normalmente sí. Ahora, además, en los móviles se busca lo que haga falta y me enseñan lo que quieren hacer. Y yo les oriento y les ayudo en lo que puedo.

¿Después de tantos años en el negocio, cómo han cambiado las costumbres?

-Se tiende a la simplificación de los trajes. La gente ya no se complica tanto como antes. Sigue habiendo algún caprichoso todos los años que se hace un traje espectacular, pero son los menos. No sé si será por la crisis, que imagino que afectará.

¿En Tolosa se siguen haciendo disfraces nuevos todos los años?

-Sí, eso se mantiene. Las cuadrillas grandes renuevan los trajes todos los años. También hay mucha gente que recupera un disfraz y lo tunea.

¿Cada vez hay más gente que se compra el disfraz hecho?

-Los particulares compran mucho traje hecho; aunque sea una porquería de traje, en la bolsa vienen todos los complementos, y sale más barato. Sin embargo, las cuadrillas grandes no lo hacen. Los trajes comprados suelen ser muy uniformizados y a la gente no le gusta ver un traje igual al suyo.

En Tolosa el Carnaval suele ser muy frío... ¿qué telas compra la gente?

-Este año se ha vendido una barbaridad la tela de pelo gordita y la que llamamos foamizada. Se verán tro-gloditas, leones, tigres...

Tendrán las primicias de muchos disfraces...

-Sí, solemos saber mucho, pero luego corre la voz... ¡este año van a hacer una Pantoja gigante, con uniforme carcelario! Aunque no nos cuenten de qué van, después de tantos años también lo adivinamos.

¿Le gusta el Carnaval?

-Me gustan mucho, pero este año nos vamos fuera para descansar. He pasado muy buenos carnavales: un año salimos toda la cuadrilla de la tribu de los galos de Asterix y Obelis, y nos quedó muy bonito. También nos lo pasamos muy bien hace años cuando salimos de chicas Martini con patines; ¡pero me pegué un tortazo horroroso! Lo mejor del Carnaval de Tolosa es la participación; el tolosarra se pone una gafas estrambóticas y ya se lo pasa bien.

Su txoko guipuzcoano favorito. Me gusta mucho Getaria, porque en casa siempre hemos tenido mucha costumbre de ir.

Un paisaje idílico. Me encanta Txindoki.

Una fiesta o un evento. El Carnaval es único, pero yo participo muy a gusto en los Sanjuanes de Tolosa, les tengo cariño y los vivo de forma especial.

Un monte. Me quedo con Ernio, porque vivo en Hernialde y lo tengo muy cerca de casa.

Una playa. La playa de Getaria, porque toda la vida he ido con los aitas a esa playa y tengo muy buenos recuerdos de mi infancia.

G

ipuzkoando