Tolosa - El tiovivo del Triángulo es ya un clásico de la Navidad tolosarra. Hugo Alves, miembro de una familia de feriantes de Urretxu, es quien está estos días al mando del colorido carrusel. El joven dice estar muy contento de visitar todos los años Tolosa, pero este año el frío y las bajas temperaturas no están ayudando al negocio.

¿Cuántos años lleva viniendo a Tolosa por Navidad?

-Llevamos cuatro años viniendo por estas fechas. Estamos muy contentos, porque hacemos una temporada larga; normalmente estamos acostumbrados a ir a fiestas y suele ser menos tiempo. Este año, además, estaremos más tiempo que nunca. Hemos llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento: montamos la atracción a principios de diciembre, y pusimos también unos hinchables en el Zerkausia, y estaremos hasta el 21 de enero. Después nos vamos a fiestas de Idiazabal. Siempre nos movemos por Gipuzkoa.

¿Es un buen lugar de trabajo Tolosa?

-Hemos trabajado muy bien, porque tenemos buenos precios acordados con el Ayuntamiento. Sin embargo, este año se nota que hay menos gente. Puede que sea por la crisis, porque no llega para todos los gastos, pero el tiempo tampoco nos ha ayudado, está haciendo mucho frío y los niños se enfrían.

¿Procede de una familia de feriantes?

-Sí, mis padres siempre se han dedicado a las ferias y es lo que hemos vivido en casa. Somos cinco hermanos y todos nos dedicamos a esto. Tenemos varias atracciones y cada uno se hace cargo de una; en Navidad otro hermano está en Irun, otro en Eibar... y así nos arreglamos. El tiovivo que ponemos en Tolosa es nuevo y es muy bonito, y a la gente le gusta mucho.

¿Conoce a mucha gente ya en Tolosa?

-Sí, claro, ya me van sonando muchas caras. Conozco a los comerciantes también, a los agentes de la OTA... Hay que portarse bien con los clientes, regalando tiques a los que vienen mucho... Es lo que hemos aprendido de nuestros padres, ¡pero aún tenemos mucho que aprender!

¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?

-Me gusta mucho el trato con la gente, es lo más bonito que tiene nuestro oficio, y visitar siempre lugares diferentes. Pero también es muy esclavo; hay que estar muchas horas, hasta que no haya gente. A veces eso es incompatible con una vida en pareja o para mantener la relación con los amigos, porque llego muy tarde a casa. Y tampoco solemos tener vacaciones, porque el verano es temporada de fiestas, la temporada más fuerte para nosotros.

Su txoko guipuzcoano favorito. Por mi trabajo conozco muchos pueblos, pero me gusta mucho Oiartzun, por su tranquilidad y por su gente.

Un paisaje idílico. Toda la zona de Jaizkibel me parece preciosa.

Una fiesta o un evento. Las fiestas de Irun y Hondarribia, con sus alardes, me parecen unas fiestas diferentes y muy bonitas. Siempre solemos ir a trabajar.

Un monte. Jaizkibel.

Una playa. La playa de Gros. Cuando tengo tiempo libre es a la que acostumbro a ir.

G

ipuzkoando