“Pasaia acordó sus lindes con Altza”

Donostia - El secretario municipal del Ayuntamiento de Donostia, Juan Carlos Etxezarreta, aseguró ayer que el Consistorio de Pasaia suscribió los límites territoriales vigentes en la actualidad -que aspira a reformar- con los municipios de Altza y de Errenteria en el siglo XIX. Por ello, cuando el pueblo de Altza pasó a formar parte de Donostia en 1939, las lindes que habían sido acordadas con anterioridad pasaron automáticamente a ser las de Donostia.

Así se expresó el secretario municipal de Donostia en la comparecencia que protagonizó ante la comisión de Servicios Generales del Ayuntamiento de Donostia a petición del grupo municipal socialista, que le pidió que informara sobre la legalidad de la petición de Pasaia a la Diputación para que esta coloque mojones en los límites señalados en el documento fundacional de Pasaia de 1805.

Como se recordará, el pasado 4 de noviembre, una delegación encabezada por la alcaldesa de Pasaia, Amaia Agirregabiria, acudió a la Diputación a reclamar al ente foral que coloque los mojones “pendientes” en las zonas fijadas en el documento fundacional, encargado por el rey Carlos IV al gaditano Joseph Vargas. Este documento está en el origen de la reivindicación de Pasaia, que se apoya en él para reclamar todas las zonas de Donostia que vierten sus aguas en la bahía de Pasaia, unos 5,5 kilómetros cuadrados de Altza, Intxaurrondo, Bidebieta y Herrera.

Preguntado por los grupos municipales de la oposición sobre si la ciudad de Donostia podía estar “tranquila” respecto a sus actuales límites territoriales, el secretario respondió que mientras haya un contencioso “habrá que esperar”. No obstante recalcó que la capital guipuzcoana tiene “un territorio reconocido sin ningún tipo de incertidumbre, asentado y fijado mediante un acta de deslinde entre el Ayuntamiento de Altza y el de Pasaia”.

El alto funcionario reiteró a los miembros de la comisión que Donostia tendrá que aguardar a que la Diputación tome o no tome alguna determinación sobre la petición de Pasaia -tiene tres meses para ello- y solo si se producen nuevos movimientos deberá ponerse manos a la obra para proteger su territorio.

Pese a todo, Etxezarreta recalcó que “lo que está deslindado no se puede volver a deslindar”. Asimismo, negó que haya habido una sentencia en el pasado que reconozca a Pasaia el territorio reclamado. “Hubo una sentencia que, a efectos de decidir sobre si un suelo muy concreto era de Altza o de Pasaia, y en ausencia de deslinde y de más documentación, cogía el documento elaborado por Vargas (...) y con eso y con el hecho de que Pasaia estaba ejerciendo jurisdicción” sobre este terreno, daba la razón al municipio portuario.

jurisdicción Asimismo, el secretario recordó que gran parte de los documentos de Donostia desaparecieron en el incendio de 1813 y manifestó que se intuye que el auto de Vargas pudo quedar suspendido. “Si el auto de Vargas de 1805 fijaba una demarcación municipal concreta, no se entiende que ni en 1810 ni en 1815 ni en los 50, 60 y 70, con regímenes absolutamente diversos, no se refiriera nadie a esa jurisdicción; hay indicios de que el procedimiento iniciado por Vargas se paralizó”, dijo.

Sobre el documento que da origen a la reivindicación, Etxezarreta agregó que el mismo Vargas “reconocía que tenía que tener una sanción real y que nunca tuvo”.

Finalmente, el secretario jurídico del Ayuntamiento de Donostia explicó que el documento elaborado por Joseph Vargas le fue encargado por el rey Carlos IV “para fijar prácticamente cuál sería el ámbito para recuperar la jurisdicción real” .