Donostia. "A lo mejor es verdad que vivimos en mundos diferentes, tenemos otra manera de hacer política. Y a lo mejor es eso lo que está detrás de muchas broncas". Son palabras del alcalde donostiarra, Juan Karlos Izagirre, tras escuchar las críticas de los tres partidos de la oposición a la gestión de Bildu, que coincidieron en acusar al alcalde de "vivir en otro mundo" tras el diagnóstico que hizo de Donostia y de los 17 meses de legislatura.

El debate sobre el estado de la ciudad que tuvo lugar ayer acabó con un alcalde optimista, satisfecho con la gestión realizada hasta el momento, que insistió en que está abierto a buscar acuerdos; con una oposición que le respondió que no es cierto que busque consenso con ellos y que criticó las maneras y la inactividad de Bildu en estos meses; y con un nuevo intento del PP para presentar una moción de censura, que de momento no prosperará porque el PNV, que la atribuyó a la campaña electoral, anunció que no la secundará.

El Pleno extraordinario que anualmente repasa el estado de Donostia duró menos que las sesiones ordinarias (tres horas y media con un único punto en el orden del día), pero se repitieron los temas, los cruces de acusaciones y las críticas habituales por todas las partes.

El alcalde "Y luego decís que Donostia está parado, si no he callado y en 45 minutos no me va a dar tiempo de decirlo todo", declaró Izagirre en su intervención, mientras repasaba cuestiones como la revisión de la OTA, la estación de autobuses, el turismo, la vivienda, el plan para fomentar el empleo, la venta de Illunbe, el plan de inversiones o la respuesta dada tras las inundaciones en Martutene: "Dimos la cara". Izagirre criticó, asimismo, la actitud de otras instituciones y, también, la de la oposición, "que en ocasiones actúa por otros intereses" y a la que atribuyó "desprecios y malas maneras", además de críticas "que a veces no tienen fundamento".

También añadió que hay que tener en cuenta que el presupuesto de la ciudad ha disminuido en 115 millones de euros con respecto a hace cinco años y consideró que, a pesar de todo, el Gobierno no ha reducido las partidas dirigidas a los ciudadanos, sino las inversiones. "Si hoy no he demostrado que en una situación difícil hemos gestionado bien, es que no nos entendemos", insistió.

La oposición "Hemos asistido a un mitin político", respondió el concejal socialista Ernesto Gasco al alcalde, a quien advirtió de que "ha suspendido el examen". Gasco echó en cara a Izagirre su actitud "complaciente", que "siempre eche la culpa a otro" y que viva "en el país de las maravillas de Alicia", alejado de una ciudad con 11.000 parados. "Esperaba una oferta de pacto y ha hecho lo contrario, nos ha insultado", consideró el concejal socialista, que ofreció a Bildu su apoyo para trabajar cuatro grandes temas: el empleo, la vivienda, las inversiones en los barrios y unos presupuestos participativos.

El portavoz del PP, Ramón Gómez, también dio un suspenso a la gestión de Izagirre en materia de inversiones, de turismo, de vivienda y, también, de participación: "No viene nunca a hablar con nosotros y tiene el despacho en frente". El portavoz popular echó en cara que el Gobierno pretende volver a subir los impuestos a los ciudadanos (una media del 2,7% correspondiente al IPC) y que, sin embargo, "es incapaz de presentar unos presupuestos a tiempo" para ver en qué se plasma esa recaudación: "No han aportado nada en estos 17 meses, solo oponerse a cuestiones ya consensuadas".

"¿De verdad cree el alcalde lo que ha dicho? Si es así, vive en una realidad virtual", arrancó el portavoz del PNV, Eneko Goia. El jeltzale repasó los diez puntos del programa de gobierno presentados por Bildu el año pasado para concluir que el balance "es muy pobre". "Yo no me atrevería a decir que el bienestar social se ha mantenido en una ciudad con casi 11.000 parados", apuntó Goia. También consideró "una broma pesada" las cifras ofrecidas por el Gobierno respecto al cumplimiento de las mociones aprobadas en los plenos. Y añadió que Bildu ha adoptado "algunos tics" de sus predecesores al criticar que el Gobierno Vasco trata mejor a Bilbao y Vitoria: "Eso me suena de los de antes. Vaya cambio... de las narices, añadiría yo".

El portavoz de Bildu, Josu Ruiz, quiso responder a las críticas con los datos del plan para estimular el empleo, entre otros. "Por encima de las diferencias siempre se encuentran cosas en común y estoy seguro de que tenemos más cosas por hacer juntos", añadió Izagirre antes de cerrar la sesión.