Donostia. El Gobierno municipal se va a tomar más tiempo para estudiar "a fondo" el proyecto de la pasarela de Mompás. Después de que el Ministerio de Medio Ambiente haya requerido tres veces una respuesta al Ayuntamiento donostiarra, parece que el plazo que se daba en la última petición -diez días desde el 4 de septiembre- se le ha quedado pequeño al Ejecutivo de Izagirre, que quiere ser "serio y riguroso" a la hora de analizar esta propuesta que cuenta con un presupuesto de más de nueve millones de euros.
Esta petición de más tiempo fue solicitada ayer por la concejala de Infraestructuras y Servicios Urbanos, Nora Galparsoro, tres horas después de que el portavoz del PP, Ramón Gómez, denunciara en una rueda de prensa que el plazo expiró el viernes.
El servicio de Costas que es, quien a través de los impuestos de la ciudadanía sufragaría el coste de la construcción de la pasarela, ya había apremiado al Consistorio en varias ocasiones para que este contestara de modo afirmativo o negativo a tres cuestiones: la disponibilidad de los terrenos donde se edificaría la infraestructura, el compromiso del Ayuntamiento de hacerse cargo de su conservación y mantenimiento y que la obra estuviera exenta de pagar tasas. "Teniendo en cuenta el tiempo transcurrido y la necesidad de planificar actuaciones se insta la remisión de dicha documentación en el plazo de diez días desde la recepción del presente escrito -4 de septiembre-", explica el documento del Ministerio.
Según afirmó Gómez, que criticó la actuación del Gobierno municipal ante esta situación, el plazo acabó el viernes. "He hablado con Galparsoro, con el departamento de Obras y Proyectos y con la Alcaldía y aquí nadie sabe nada de la carta, ni de una posible respuesta", decía el edil antes del mediodía.
"Más de nueve millones de euros que el Gobierno central tenía previsto invertir en nuestra ciudad entendemos que se quedan sin ser adjudicados porque los señores de Bildu, tras tres requerimientos del Ministerio (en diciembre de 2011 y en abril y septiembre de este) , se han negado a contestar", añadió el corporativo popular.
Gómez defendió que esta obra "iba a ser un revulsivo económico, generador de empleo y un atractivo turístico que el Gobierno de Izagirre ha desechado". "No han hecho nada de nada, lo han dejado pasar, como todo. Entendemos y lamentamos que esta dejadez a la que nos tiene acostumbrados este Gobierno se va a convertir, desgraciadamente, en una oportunidad perdida", apostilló.
"extensa y compleja" Pasadas las dos de la tarde el Ejecutivo local, a través de un correo electrónico, envió al servicio de Costas la petición de ampliación de plazo. "Dada la naturaleza, dimensión e importancia de la intervención resulta escaso el plazo de diez días concedido", se expone en el escrito. En este sentido, la responsable de las Infraestructuras en Donostia, Nora Galparsoro, apuntó que quieren ser "serios y rigurosos". "No queremos dar una respuesta al proyecto sin estudiarlo a fondo. La documentación que Costas ha enviado es extensa y compleja por lo que hemos solicitado la ampliación del plazo", señaló.
De todos modos, el Gobierno de Bildu ya ha mostrado en varias ocasiones su rechazo a este proyecto por razones económicas y ecológicas.
"Nosotros siempre nos hemos posicionado en contra, pero es que además, tendríamos que ver cómo incidiría el oleaje en la infraestructura y habría que tener en cuenta también el mantenimiento que requeriría: unos 500.000 euros anuales", explicó el pasado mes de abril el concejal de Desarrollo Económico, Josu Ruiz. "Parece que el Gobierno central quiere imponer ciertos proyectos y que quiere ayudar en cuestiones en las que no se necesita y retirar los recursos en aquellas iniciativas donde sí hacen falta", agregó entonces. Asimismo, en declaraciones anteriores, el propio alcalde, Juan Karlos Izagirre, ya advirtió de que esta propuesta supondría un "desastre ecológico" en la zona.
Por su parte, el grupo socialista defiende la construcción de la pasarela, mientras que el PNV aboga por que la propuesta sea estudiada. De hecho, en mayo se constituyó un grupo de trabajo sobre Mompás que, según el Gobierno municipal, tiene un carácter "meramente consultivo".