olaberria. Goierri tiene dos almas: la rural y la industrial. Esto quedó ayer más en evidencia que nunca, de la mano de la agencia de turismo comarcal Goitur: en una sola mañana se inauguraron unos apartamentos turísticos en un bucólico rincón de Zegama y se presentaron a los medios las renovadas habitaciones de un hotel situado junto a la N-I y rodeado de empresas. En ambos actos tomó parte la directora de Turismo del Gobierno Vasco, Isabel Muela.

La mañana arrancó en Arrieta Txiki de Zegama y finalizó en el hotel Castillo. Este alojamiento de carretera es uno de los establecimientos con más solera de Goierri. Lo abrió en 1957 Juan José Castillo, padre del afamado cocinero José Juan Castillo. Este hombre regentaba el restaurante Zubizarreta de Ordizia, situado junto a la antigua N-I. Cuando supo que la carretera se iba sacar del casco urbano, decidió comprar un terreno junto al nuevo trazado y construir un hotel.

industrialización La apertura de este establecimiento hostelero coincidió con la industrialización (aquel mismo año Aristrain abrió su acería de Olaberria), por lo que desde un principio la clientela la han aportado mayoritariamente las empresas de la comarca y la carretera N-I.

Gracias al auge de la industria y el turismo, y al buen hacer de Castillo, el hotel tuvo éxito y en 1963 se crearon 20 habitaciones más. En 1971 se abrió la cafetería. El restaurante y el hotel llegaron a dar trabajo a más de 40 personas, casi todas mujeres. La familia Castillo regentó el establecimiento hasta el año 1987.

Desde entonces ha pasado ya un cuarto de siglo, pero el Castillo no ha perdido su esencia: cuenta con tres estrellas y se nutre principalmente de los clientes de la grandes empresas de Goierri. Sus 38 habitaciones, todas dobles, han sido renovadas. El director del hotel, Juan Manuel Pérez, explica que los cuartos y sus baños han sido decorados siguiendo las tendencias actuales. "También estamos pensando reformar la cafetería y adaptarla a las necesidades de los minusválidos. Esperamos hacerlo este mismo año".

Si el hotel Castillo es el exponente turístico del alma industrial de Goierri, los agroturismos se encargan de mostrar el lado rural. Porque esta comarca aúna como ninguna otra industria (CAF, Irizar, Ampo, Indar...) y naturaleza (Aralar, Aizkorri...).

En las faldas de Aizkorri, precisamente, se inauguraron ayer los apartamentos turísticos Arrieta Txiki. Así, junto al agroturismo Arrieta Haundi se puede disfrutar ahora de tres apartamentos equipados con cocina. Se les ha denominado Sorgina, Lamia y Mari, como homenaje a las mujeres. Cabe destacar que los propietarios han decidido apostar por las energías renovables, contribuyendo así al cuidado del medio ambiente.

Arrieta Haundi y Txiki están situados en un enclave ideal para la práctica del senderismo, la bicicleta de montaña, la escalada y el parapente. El primero dispone de cinco habitaciones dobles y una individual, tres baños, cocina y sala con televisón y chimenea. Además, en estos caseríos de Zegama el turista puede disfrutar de una barbacoa y aprender a cultivar hortalizas. Un lugar ideal para aquellos clientes de las empresas de Goierri que desean volver un fin de semana con su famillia para conocer más a fondo el lado verde de la comarca.