Zumarraga y el Orfeón, de la mano
El Orfeón Donostiarra actuará este sábado en Zumarraga, con motivo de la remodelación del órgano de la parroquia. A lo largo de su historia esta agrupación coral ha tenido una estrecha relación con la localidad de Urola Garaia.
EL Orfeón Donostiarra es la agrupación coral por excelencia en Gipuzkoa. Es un símbolo del territorio y se nutre de músicos de todos los pueblos. Casi todos los municipios han aportado gente y eso hace que el coro sea muy querido en todo el territorio. Este sábado, a las 20.00 horas, actúa en la parroquia de Zumarraga. La localidad de Urola Garaia también puede presumir de haber aportado alguno de los granitos de arena que han hecho del Orfeón uno de los grandes coros de Europa.
Sin duda alguna, el zumarragarra que mayor huella dejó en la agrupación fue Secundino Esnaola. Dirigió el grupo durante 27 años, de 1902 a 1929, y fue el artífice de la entrada de las mujeres. Hasta entonces era un coro de voces graves. El nombre de Secundino Esnaola está escrito pues con letras de oro en la historia del Orfeón Donostiarra.
El primer contacto de Esnaola con la música tuvo lugar precisamente en la parroquia donde actuará el Orfeón el sábado. Su primer profesor fue Juan Lino de Leturia y enseguida mostró destreza en el canto. Fue seminarista en Bergara y en Salamanca, donde formó y dirigió un coro. Con 21 años dejó el seminario, se trasladó a Donostia y trabajó como director del coro en la parroquia de San Vicente. También impartió clases de solfeo y canto.
En 1902 fue nombrado director del Orfeón Donostiarra, ganando al poco tiempo el Concurso Internacional de Royan. Tal y como se ha indicado, enfrentándose a los detractores, permitió la entrada de las mujeres. En Francia se le distinguió con varios títulos y Donostia y Zumarraga le concedieron sendas calles. En su localidad natal fue nombrado además hijo predilecto. Aquel 3 de julio de 1927, al igual que lo va a hacer el sábado, el Orfeón actuó en la parroquia.
84 años después de aquel recital Zumarraga sigue teniendo representación en el coro: Maider Mendia lleva ya siete años cantando con el Orfeón. Se presentó a las pruebas animada por una tía suya que vive en Donostia. "Vio los carteles que se ponen para captar gente y me animó. Mi sueño era cantar en el Orfeón, pero lo veía muy difícil. Mi tía siguió insistiendo y, al final, pensé que no perdía nada con presentarme. El día en el que hice la prueba toda mi familia estaba en Burgos en un funeral y creo que recibí algún tipo de ayuda especial. Todo eso fue en marzo de 2004".
Antes de empezar a tomar parte en los recitales tuvo que amoldarse a la manera de trabajar del Orfeón. "Dominar las obras y la jerga del director? Hasta entonces solo había cantado en la coral Goiargi de Urretxu y Zumarraga y el modo de trabajar de una y otra coral son muy diferentes. En Donostia se dispone de mucho menos tiempo para preparar cada partitura".
Su primera actuación con el Orfeón fue durante la Quincena Musical de 2005. La siguiente será el sábado en Zumarraga. No será la primera vez que actúa ante sus vecinos, pues en 2008 la agrupación donostiarra cantó en Urretxu con motivo del 25º aniversario de la coral Goiargi. Siempre que el Orfeón es invitado a esta zona de la provincia se celebra un gran acontecimiento: en 1927 el homenaje a Secundino Esnaola, en 2008 el aniversario de la coral local y esta vez la restauración del órgano de la parroquia.
Durante 2010 se ha desmontado, limpiado, arreglado y ajustado. La restauración ha costado 50.000 euros y ha sido financiada por la parroquia. El órgano de la parroquia fue construido por la empresa aragonesa Pedro Roqués e Hijos en 1871.
El sábado se sentará en él el prestigioso organista donostiarra Gerardo Rifón. Durante la primera parte del concierto tanto él como el Orfeón se situarán en el coro y durante la segunda en el altar. En la primera media hora se interpretarán el Aita Gurea de Madina y composiciones de Bach, Mozart, Rossini, Casals y Mendelssohn. Durante la segunda ofrecerán obras de Brahms, Busto, Fauré y Haendel.