zarautz. El Real Club de Golf de Zarautz deberá pagar 70.000 euros anuales al Ayuntamiento de la localidad si quiere seguir usando la parcela municipal del campo zarauztarra. Un tercio de los terrenos es de titularidad pública y su renta se fijó en 250 pesetas anuales en 1916, fecha desde la que no ha sufrido variaciones. Por ello, en la actualidad, el club abona 1,5 euros al año por hacer uso de la parcela municipal.

El grupo local de Ezker Batua-Berdeak/Aralar mostró "su satisfacción" por el acuerdo adoptado el jueves pasado por la junta de gobierno, en el que se requiere al Real Club de Golf a actualizar la renta anual que paga por el uso de 65.000 metros cuadrados de terreno de propiedad del Consistorio. No es la primera vez que el Ayuntamiento zarauztarra exige un aumento del arrendamiento a los socios del club. En 2005, el entonces concejal de Ezker Batua-Berdeak, Patxi Coira, denunció "esa situación escandalosa" y presentó una moción pidiendo "la renegociación del acuerdo y la actualización de las cantidades". La alcaldesa de entonces, Maite Etxaniz, se comprometió a negociar la revisión de la renta en un plazo de tres meses.

a los tribunales Según indican desde Ezker Batua, durante varios meses del año 2006, Coira solicitó públicamente en todas las sesiones plenarias información sobre la actualización de la renta, "no obteniendo respuesta". El alcalde, Jon Urien (Hamaikabat), explicó ayer a este periódico que el Consistorio sigue a la espera "desde hace mucho tiempo" de ver qué ocurre con el juicio que el Real Club de Golf tiene pendiente con la familia Azlor de Aragón, sucesora de los marqueses de Narros, propietaria de los dos tercios restantes de los terrenos del golf. Estos últimos han interpuesto recientemente y por segunda vez, a través del despacho de abogados Cuatrecasas de Donostia, una demanda de desahucio contra el club, para que desmantele las instalaciones deportivas de la parcela de su propiedad. Antes de decidir llevar el caso a los tribunales, la familia de Narros exigió a los responsables del club de golf que pagasen 150.000 euros al año durante diez años y cambiar así el contrato firmado en 1916, que obligaba a la sociedad a abonar la cantidad de 500 pesetas al año. Aquel contrato venció en 1936, a pesar de haber sido prorrogado posteriormente.

Los socios del campo de golf no aceptaron el cambio propuesto por los Azlor de Aragón y optaron por tratar de comprar los terrenos. Sin embargo, la familia no quiso desprenderse de su propiedad y finalmente, ha decidido llevar el caso, una vez más, al juzgado de Azpeitia.

Urien subrayó que el Ayuntamiento "ha estado durante años esperando el veredicto de ese pleito", porque en el contrato que firmaron los marqueses de Narros en 1916 se especifica que "si se prolonga el contrato con los herederos, se prorrogará también el acuerdo con el Consistorio".

Por su parte, en otro intento fallido, en 2007, la comisión de Deportes del Ayuntamiento abordó el tema para modificar el contrato con el club y, tras actualizar el precio de las hectáreas, se reclamó a los responsables del golf que ofrecieran 20.000 euros en servicios al año. De esta manera, aunque el club no pagaría el dinero en metálico, cedería sus instalaciones deportivas a los zarauztarras.

Según detalló el alcalde, entonces "no se llegó a ningún acuerdo en concreto". A pesar de ello, Urien sigue defendiendo esa idea: "Ahora pedimos al club que pague 70.000 euros anuales, pero nuestro objetivo primordial es que en el futuro negociemos para sacarle partido a los terrenos y que se puedan utilizar para actos públicos o para los vecinos. Como cuando hicimos la presentación del Plan General en sus instalaciones". Y es que el cuarto campo de golf más antiguo del Estado, además de estar ubicado a orillas del mar Cantábrico, alberga en la actualidad un campo de prácticas, una escuela para todas las edades, un salón social, una biblioteca, diversas salas de reuniones, campos de tenis y paddle.

revisar cada cinco años Al ver que transcurrían los años y que "no se había obtenido ningún resultado", Ezker Batua-Aralar propuso el pasado diciembre que el Ayuntamiento requiriera oficialmente al Real Club de Golf la revisión de la renta anual y la fijara en 70.000 euros al año, "de acuerdo con lo que marca el reglamento de bienes de las entidades locales". Ahora, tras el respaldo de los demás grupos municipales (Hamaikabat, PNV, PSE-EE y PP) esta solicitud ha sido acordada, por lo que los responsables políticos acaban de notificar al Real Club la actualización de la renta "si quiere seguir utilizando los terrenos".

Según explicó el concejal de Urbanismo, Ubaldo Ortiz (EB), los socios tendrán un plazo de un año para responder a la exigencia del Consistorio e intentar llegar a un acuerdo para modificar el actual convenio. De no ser así, la Administración no descarta romper del todo el contrato vigente.

De la misma manera, Ezker Batua-Aralar pidió que en la negociación de un nuevo acuerdo de arrendamiento se tenga en cuenta la inclusión de los terrenos en el biotopo protegido de Iñurritza y que el uso de golf es, a largo plazo, "incompatible con los objetivos de conservación y regeneración de los valores naturales de la zona, por lo que de alcanzar un nuevo acuerdo, éste debería tener un plazo máximo de cinco años".

Por su parte, en la página web del club de Golf destacan que "el campo contribuye a preservar la naturaleza del entorno de Iñurritza, que fue declarado biotopo protegido el año 1997 por el departamento de Industria, Agricultura y Pesca del Gobierno Vasco". De llegar a cumplirse lo que exige el Ayuntamiento zarauztarra, los 1.000 socios actuales del club deportivo deberán pagar 70.000 euros al año (70 euros cada uno). Este periódico intentó ayer reiteradamente obtener la opinión de los responsables del Real Club de Golf de Zarautz, sin éxito alguno.