El sector de las bebidas y el de la coctelería se renueva cada año con propuestas sorprendentes y originales que surgen como resultado de las nuevas tendencias de consumo.

A medida que transcurre el nuevo año, los guipuzcoanos buscan adaptarse a las nuevas tendencias de mixología que rigen en el sector. Desde el consumo del cóctel Margarita como uno de los combinados favoritos, hasta la importancia en la calidad y el consumo moderado de bebidas espirituosas.

Asimismo, se percibe un aumento de la sensibilidad por la sostenibilidad y la relevancia de la cultura del cóctel, que transporta al consumidor a otros destinos y/o épocas.

El Margarita, de los más populares en Gipuzkoa

Nos encontramos en un momento de gran popularización de los cócteles clásicos, en los cuales se ha logrado una fusión única entre lo tradicional y lo contemporáneo a través de combinaciones que evocan nostalgia e innovación. En este escenario, se mantiene la relevancia y el papel fundamental de la recreación de grandes clásicos y las recetas atemporales.

Agrio, afrutado y con un toque desenfadado, la receta del emblemático cóctel Margarita se ha convertido en un clásico recurrente para la población vasca que apuesta por este combinado de tequila, zumo de lima y Cointreau, como uno de los más consumidos. En los últimos años, se ha visto como se ha avivado el interés por este icónico cóctel, reforzándose como una propuesta sólida en las tendencias de bebidas y como uno de los combinados más consumidos.

Cóctel margarita Pixabay

La era de la calidad y los cócteles alternativos

Los consumidores guipuzcoanos están adoptando una tendencia que implica priorizar la calidad sobre la cantidad, así como elegir bebidas con más sabor, más artesanales y, sobre todo, premium.

La cuestión para respetar este equilibrio es la apuesta por una graduación alcohólica que permite ofrecer el perfil de sabor correcto. Además, en este contexto, la escena de los cócteles ha experimentado una interesante adaptación, ofreciendo versiones alternativas que incluyen menos alcohol y otros ingredientes sustantivos, pero no por ello menos deliciosos y creativos. Un ejemplo de ello son las versiones alternativas al clásico cóctel Margarita o al refrescante Cosmopolitan.

En este sentido, Cointreau siempre ha priorizado la calidad de sus ingredientes y el proceso de destilación de su licor de naranja, transmitiendo de generación en generación sus técnicas únicas y manteniendo la máxima calidad, con el equilibrio perfecto entre el sabor de las esencias de naranjas dulces y amargas.

Sostenibilidad en los cócteles

Al igual que en el sector hostelero en general, en el mundo de la coctelería se hace cada vez más hincapié por la sostenibilidad. Los guipuzcoanos prefieren los cócteles con ingredientes naturales, que respetan el medio ambiente y la salud. Por ello, es fundamental brindar soporte a los productores ayudándoles a adoptar prácticas sostenibles y fomentando la investigación.

Las diferentes compañías se suman a esta tendencia incorporando aromas, flores, plantas y aceites naturales para crear cócteles originales y auténticos. Se utilizan cáscaras de naranja provenientes de productores de confianza en diversas regiones del mundo para su elaboración. Desde el último año, la marca refuerza su compromiso con el medio ambiente, implementando medidas sostenibles en su proceso de producción, que van ligadas a valores como el respeto por el entorno y la economía circular.

Donostia cuenta con numerosos establecimientos donde tomar un cóctel Pixabay

Conexión entre bebidas espirituosas y destinos de viaje

Según la investigación de Cointreau, en 2024 se incrementará significativamente el vínculo entre las bebidas espirituosas y los destinos de viaje.

En este contexto, la coctelería posee la capacidad de transportar a los consumidores en el tiempo, de un destino a otro, e incluso de un país a otro: un buen cóctel enriquece la recreación de momentos nostálgicos, así como el teletransportarnos a lugares de ensueño.

Esta evolución no sólo tiene que ver con el lugar, sino también con el momento en que los consumidores disfrutan de las bebidas. Por ello, los cócteles clásicos y los sabores frescos desempeñarán un papel esencial al transportar al consumidor a lugares inexplorados.