La fruta fresca debe estar en todos los menús básicos aunque a veces sus precios lo ponen difícil en tiempos de crisis. A algunos, porque hay afortunados, en el doble sentido de la palabra, que pueden probar y disfrutar de algunos de las frutas más exclusivas del mundo, y que al margen de su calidad se pagan a precio de oro por su excepcionalidad.

Durante muchos siglos, especialmente tras el descubrimiento de América, cuando las nuevas plantas empezaron a llegar a Europa, solo los más poderosos podían permitirse en sus mesas estos frutos. Y muchos lo hacían únicamente por motivos de prestigio. Por lo que ahora se denomina postureo. Y esto no ha cambiado. Estas son la frutas más caras.

Un melón Yubari abierto. Freepik

Melón Yubari

El melón Yubari se cultiva en Hokkaido, la segunda isla más grande de Japón. Su precio se sitúa entre los 11.000-13.000 euros, pero en alguna ocasión se han llegado a pagar hasta 18.000 euros por una pareja de este manjar. Se ha convertido en un símbolo de estatus y suele regalarse. Su prestigio se debe a que se le considera el melón del sabor perfecto. Solo se comercializan los perfectamente redondos, con la coloración exacta, la piel reticulada perfecta, Solo hay una cosecha al año cultivada en un ambiente controlado.

Sandía Densuke

Se ha llegada a vender una sandía Densuke por 6.000 euros, lo que le convierte en la segunda fruta más cara del mundo. También se cultiva en la japones isla de Hokkaido. Cada año se producen 10.000 unidades. El precio base de cada una es de entre 250 y 300 euros, pero en las subastas de los mejores ejemplares los precios se pueden disparar. También se regalan y es una muestra de poder adquisitivo. Un claro ejemplo de postureo social. Son conocidas por no tener prácticamente semillas y ser increíblemente dulces. Es una sandía negra con su interior rosa.

Uvas Ruby Roman

Un agricultor recoge un racimo de uvas Ruby Roman. Ishikawafood

Seguimos en Japón, en la isla de Honshu, la principal del archipiélago. Un racimo de uvas Ruby Roman puede alcanzar un precio de más de 900 euros. Pero como en los casos anteriores en las subasta todo se dispara y se llegó a pagar por uno 10.000 euros. Solo se producen 24.000 racimos, lo que las hace increíblemente raras y exclusivas. Son muy dulces y cada uva del racimo es de gran calibre, hasta casi alcanzar el de una pelota de ping pong.

Mangos Taiyo No Tamago

También conocidos como mangos Miyazaki, se culltivan en Japón y llegan a costar hasta 3.500 euros la pareja. Cada uno pesa más de 350 gramos y destaca por un sabor muy dulce. Una vez más es el resultado de un proceso de selección muy cuidado y minucioso. Recibe el apodo de huevo de sol o huevo de oro.

Las piñas de The Lost Gardens of Heligan

Las piñas, esa exótica fruta originaria de Sudamérica, más caras del mundo se cultivan en la muy británica Cornualles, en concreto en el Lost Gardens of Heligan, un jardín botánico. Su coste de producción puede llegar fácilmente a los 1.500 euros y su valor en el mercado a los 12.000. Crecen en los Pozos de Piña desarrollados en el siglo XIX y calentados con una reacción química a partir de 30 toneladas de estiércol y orina de caballo mezclado con balas de paja. Su sabor, el de las piñas, agradablemente dulce, sin hebras y con un aroma explosivo. Tardan dos años en crecer y solo las comen los trabajadores del jardín botánico.

Sandías cuadradas

Cada una de estas peculiares sandías ronda los 800 euros, pero depende de la temporada. Se pusieron El precio varía dependiendo de la temporada, pero estas sandías con forma cuadrada tienen un precio de unos 800 dólares por pieza. Los japoneses idearon este cultivo para poder facilitar el almacenaje de las sandías y utilizan moldes para conseguirlo. Su éxito fue más allá de su idea inicial. Ahora también se moldean con otras formas.

Peras Buda o pera bebé

Dos peras buda, o bebé, ya formadas en el arbol.

Dos peras buda, o bebé, ya formadas en el arbol.

Cada una de estas peras de origen chino se vende por un mínimo de 8 euros. Como las sandías cuadradas, crecen dentro de una cápsula que les da la forma de buda o de un orondo bebé, según quien lo mire. Crecen en moldes especiales que les hacen tener la forma deseada. Su particularidad es su largo tiempo de vida útil debido a la cantidad de conservantes que le incorporan en su cultivo. Detrás de la fruta en s, existe el mito de que quien la consuma, vivirá en la inmortalidad.

Fresas Sembikiya Queen

De nuevo en Japón, estas exquisitas fresas Sembikiya Queen se venden en paquetes de una docena a un precio de 85 euros. Su aspecto es perfecto en cuanto a forma, gran tamaño y color. Son de un rojo vivo y unas hojas son de un intenso verde oscuro. El ideal de fresa. Como detalle llamativo, sus semillas externas son blancas.

Naranjas Dekopon

Una caja de seis unidades de naranjas Dekopon puede costar unos 80 euros. Su piel desigual y su nudo en la parte superior ocultan unos gajos muy dulces. La fruta nació a principios de la década de 1970 como un híbrido de naranjas navel, pomelos y mandarinas. Son muy fáciles de pelar y no tienen semillas. Su proceso de cultivo incluye una cobertura de arcilla para protegerlas del sol del verano. Cuando se exportaron a Estados Unidos se les dio el nombre de Sumo Citrus. El nudo de su parte suprior recordaba el moño de los luchadores de sumo.

Manzanas Sekai-ichi

Cada manzana Sekai-Ichi ronda el kilo de peso. Su precio por unidad puede superar los 20 euros. Además de por su tamaño destacan por su lisa, brillante y limpia piel. Quizá se deba a que a cada una se le da un lavado con miel. Para asegurar su calidad, estas manzanas pasan por un riguroso proceso de selección que garantiza que su piel esté libre de manchas e imperfecciones.

Fresas blancas o Piniberry

Probablemente las fresas más raras del mundo. Los buscadores de productos exclusivos pagan hasta 10 dólares por un sola fresa. Es una hibridación natural de dos especies de fresas americanas. Son muy apreciadas en Japón, principalmente, por su peculiar sabor a piña. Su color blanco se debe a una deficiencia de la proteína que la hace madurar. Por el contrario, sus semillas son rojas.