Gran parte de la financiación de los partidos políticos depende de fondos públicos que son aportados por distintas instituciones dependiendo de la representación que obtengan los partidos políticos.

El Parlamento Vasco otorga a cada grupo político 219.360 euros anuales. Además, por cada parlamentario las formaciones reciben otros 36.552 euros más al año. A esto hay que sumar la dotación que reserva el Gobierno vasco de los Presupuestos Generales de la CAV para los partidos políticos. Solo en 2020 esa cifra asciende a 4.536.000 euros.

El PNV, con 28 parlamentarios, es el partido que más subvención recibió entre 2016 y 2019: 1.242.816 euros anuales procedentes de la Cámara vasca y 1.750.903,84 euros al año del ejecutivo. Por detrás esta EH Bildu con sus 18 parlamentarios, y 877.296 euros recibidos del parlamento y 1.033.826,51 del Gobierno. Elkarrekin Podemos, PSE-EE y PP cobraron entre 700.000 y 500.000 euros al año de cada una de las instituciones.

Pero además los partidos recuperan lo invertido durante la campaña electoral si logran al menos un escaño y entregan sus cuentas con los gastos electorales al Tribunal Vasco de Cuentas. Es la Junta Electoral quien decide las cuantías correspondientes a cada candidatura. Tras las elecciones celebradas en 2016, se repartieron entre las formaciones que obtuvieron representación parlamentaria 4, 8 millones de euros para hacer frente a los gastos de campaña.