La evolución al alza de las matriculaciones de vehículos eléctricos en Euskadi es lenta, pero imparable. El pasado año los concesionarios vascos habían matriculado 1.461 unidades cuando cinco años antes, en 2018 esta cifra era de 324, con una diferencia del 77,8% en este periodo.

Los datos corresponden a la Dirección General de Tráfico DGT y se recogen en una respuesta de la consejera vasca de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, a una pregunta formulada por Mikel Otero, del grupo parlamentario vasco de EH Bildu acerca de la evolución de la movilidad sostenible en la CAV.

Las matriculaciones de coches que funcionan con gasolina caen un 46% desde 2018

En la información facilitada destaca el notable crecimiento del coche eléctrico, en detrimento además de los automóviles de combustión interna. Las matriculaciones de los que funcionan con gasolina descienden entre 2018 y 2022 un 46%, mientras que la caída de los diésel es más abrupta, del 77,4%. En la respuesta parlamentaria, el Departamento de Desarrollo Económico advierte de que la DGT incorpora a los híbridos en la categoría de gasolina o gasóleo.

A pesar de esta evolución, la presencia de los vehículos eléctricos en Euskadi todavía es incipiente, al representar el 3,9% del total de matriculaciones en 2022 frente a los 64 puntos porcentuales que alcanzan los coches de gasolina y los 30,6 puntos de los diésel.

RECARGA

Uno de los motivos que puede explicar la reticencia de los vascos a adquirir un automóvil eléctrico se encuentra en la carencia de una infraestructura de recarga dimensionada, aunque en este ámbito también se registran importantes avances.

Según los datos aportados por Arantxa Tapia, en 2022 existían 1.132 puntos de recarga públicos y privados en la CAV para los 1.461 coches eléctricos matriculados. La información apunta a que los 215 puntos públicos representan un avance del 64,6% respecto a 2018 y los 851 privados han experimentado un crecimiento del 85