El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, afirmó ayer que, en el marco de la negociación con los agentes sociales para culminar la reforma de pensiones, que se retomó ayer mismo, planteará subir progresivamente la pensión máxima y elevar al mismo tiempo la base máxima de cotización, para contribuir a la sostenibilidad del sistema.

Escrivá, en declaraciones a RNE, subrayó que la pensión máxima en España es “relativamente baja” en comparación con la de otros países e indicó que si esta se eleva “de forma suave” al tiempo que se incrementa la base máxima, aumentarán los ingresos del sistema en las décadas de los 30 y los 40, que es donde el sistema sufrirá “un poco más de tensión” por la demografía.

Junto a esta medida, Escrivá señaló que en esta última ronda de negociaciones con los agentes sociales para culminar la reforma de pensiones se abordará cómo ayudar a mejorar la equidad del sistema a la hora de calcular la pensión en las nuevas carreras profesionales. El ministro, que descarta que se vaya a ampliar de 25 a 35 años el periodo que se toma en cuenta para determinar la cuantía de la pensión, explicó que, para uno de cada tres trabajadores, los mejores años de cotización ya no son los últimos de su carrera laboral, como sí sucedía en las carreras tradicionales. Por eso cree que hay que analizar si se puede actuar sobre el periodo de cálculo de la pensión y dar un mejor tratamiento a las lagunas de cotización (periodos en los que no se cotiza por no estar empleado).