Un total de 26.674 trabajadores vascos sufrieron un accidente de trabajo que conllevó baja laboral en los nueve primeros meses del año, lo que supone 4.102 accidentados más (+18,2%) que en el periodo enero-septiembre del pasado año.

Según datos de Osalan, recogidos por Europa Press, los accidentes en jornada entre enero y septiembre ascendieron a 23.007 (+18,9%) y los contabilizados 'in itinere' a 2.540 (+11,9%). Por su parte, las recaídas que conllevaron baja fueron 1.127 (+18,8%).

Del total de accidentes en jornada de trabajo, 22.864 fueron leves (+19%), 122 graves (-4,7%) y 21 mortales (cuatro más que en 2020). Los siniestros 'in itinere' de carácter leve fueron 2.520 (+12,1%), hubo 17 graves (por 19 en 2020) y tres fallecidos (uno menos que un año antes).

Por territorios, la siniestralidad creció un 22,3% en Araba, con 4.124 accidentes en jornada de trabajo; un 18,8% en Bizkaia, tras apuntar 11.632 siniestros, y un 17,1% en Gipuzkoa, al sumar 7.251 percances.

El sector con más siniestros en jornada de trabajo fue Servicios (12.489 accidentes), seguido de la Industria (7.320 siniestros), Construcción (2.771 accidentados) y Agricultura, Ganadería y Pesca (427 bajas).

De esta forma, el sector con mayor siniestralidad laboral fue la Construcción (49 bajas por cada mil ocupados), seguido de Industria (44,8 bajas), Primario (43,6 bajas por cada mil ocupados), y Servicios (18 bajas por cada mil trabajadores).

Por otra parte, Euskadi contabilizó en el periodo enero-septiembre 983 enfermedades profesionales nuevas que causaron baja laboral, lo que representa un ascenso del 11,3% con respecto a las contabilizadas en 2020.

Los casos de enfermedades profesionales que no provocaron baja se elevaron a 991, un 12,9% más que las 878 enfermedades sin ausencia laboral contabilizadas entre enero y septiembre de 2020.