- La CNMC ha autorizado en segunda fase la compra por parte de Mémora de la principal empresa del sector funerario de la CAV, Rekalde, y de la más importante navarra, Irache, tras haber realizado una segunda revisión e incorporado condiciones a Mémora para evitar efectos anticompetitivos.

Al coincidir las actividades de las tres firmas funerarias, la CNMC optó por profundizar en el estudio de la segunda fase de adquisición y pidió informes a la Autoridad Vasca de Competencia y a la Autoridad Navarra de Competencia.

En su análisis, la CNMC identificó potenciales riesgos para la competencia en el mercado de los servicios funerarios, en particular, en el mercado mayorista de tanatorios.

En respuesta, el pasado mes de agosto Mémora presentó una serie de compromisos para solucionar los diversos problemas que la operación presentaba para la competencia.

Después de ser sometidos a un test de mercado, Mémora presentó nuevos compromisos este mes de septiembre con intención de que, tras la adquisición de ambas sociedades y sus filiales, la situación competitiva quedara prácticamente inalterada con respecto a la situación actual.

La CNMC considera que, de esta forma, “se evitará el paso a una situación prácticamente de monopolio que generaba la operación garantizándose, al menos, que la operación no empeorará la situación competitiva preexistente a la operación”.