Iberdrola se suma a la apuesta de Euskadi por el hidrógeno con una red de recarga

El proyecto de la eléctrica supondrá una inversión de unos 37 millones de euros y la compañía presidida por Ignacio Galán ha firmado ya acuerdos con una treintena de futuros clientes, así como con varias decenas de empresas vascas que actuarán como proveedores de los equipos y de su instalación, confirmando el efecto tractor y dinamizador de Iberdrola en la CAV.

El proyecto está incluido dentro del plan Next Generation EU lanzado por Europa para ayudar a transformar la economía e incentivar la salida de la crisis del covid.

El transporte pesado -camiones, autobuses, etc.- de larga distancia no se lleva nada bien con el vehículo eléctrico de baterías, al menos en la situación en la que se encuentra actualmente el desarrollo de esta tecnología, porque sus importantes exigencias de potencia demandan una enorme red de baterías, con el elevado peso que ello supone, y gran tiempo de recarga.

De ahí que para estos vehículos se apueste por la pila de combustible que genera electricidad gracias al hidrógeno, un combustible que se recargaría de forma similar a las gasolinas en tiempo y que permite una autonomía mucho mayor y sin emisiones.

La inversión de Iberdrola prevé la instalación de hidrogeneras en las inmediaciones de Gasteiz (Jundiz), así como en las cercanías de los puertos de Bilbao y Pasaia.

Esta propuesta de Iberdrola ayudaría a crear un proyecto transversal para impulsar un modelo industrial sostenible, basado en el hidrógeno verde. Asimismo, permitiría reducir la dependencia energética vasca “gracias al uso de energía renovable producida con recursos locales, y potenciaría las sinergias entre los sectores logístico, energético e industrial», según el responsable del área de Hidrógeno de la eléctrica vasca Millán García-Tola.

Estas futuras estaciones de servicio de H2 estarán alimentadas, principalmente, por energía solar gracias a plantas fotovoltaicas instaladas junto a los surtidores, con el objeto de dinamizar un ciclo de autoconsumo. La energía solar permite realizar el proceso para obtener hidrógeno.

El plan de Iberdrola incluye la construcción de diez electrolizadores con una capacidad global de diez MW que permitirán la generación diaria de 4.000 kilos de hidrógeno verde. Dentro de este proyecto se incluiría la incorporación de baterías inteligentes para el almacenamiento de la energía excedente de la producción fotovoltaica.

De forma similar a como ha hecho Petronor con el denominado Corredor Vasco del Hidrógeno, Iberdrola ayudará a dinamizar el tejido industrial vasco y para esta iniciativa cuenta con la colaboración de importantes empresas vascas proveedoras, entre ellas las guipuzcoanas ABC Compresores, Ampo, Elecnor, Hidroambiente, Idom, Indar, Jema y Ksb.

La eléctrica vasca ha firmado ya un acuerdo de intenciones con una treintena de potenciales clientes -usuarios intensivos de redes de transporte-, entre los que se encuentra Pepsico-Kas, Alsa, Aena, CAF-Solaris o Irizar. Esta iniciativa es “modular y escalable” y, según Iberdrola, en la fase de construcción y explotación de esta red se crearán 1.700 empleos.

Objetivo. Iberdrola instalará hidrogeneras (gasolineras de hidrógeno) en Gasteiz, Bilbao y Donostia para que los camiones, autobuses y furgonetas que operen en el sector de transporte pesado en Euskadi puedan funcionar con motores de pilas de combustible abastecidas por hidrógeno verde. Este combustible será producido de forma local en las citadas estaciones de servicio gracias a que contarán con tres plantas fotovoltaicas anexas para ayudar a generarlo .

Producción. Se prevé instalar plantas de diez MW de electrolizadores capaces de producir 4.000 kilos diarios de hidrógeno, con una inversión de 37 millones de euros.