- Con la crisis económica generada por la pandemia de coronavirus en algunos casos llueve sobre mojado, como en la comarca guipuzcoana de Oarsoaldea, que se vio muy castigada en la anterior recesión de 2008 y, sin mucho plazo para recuperarse, se encuentra inmersa en una nueva coyuntura económica compleja. Sin embargo, son muchos los proyectos que se han planteado por esta zona integrada por los municipios de Errenteria, Lezo, Oiartzun y Pasaia que requieren de apoyo para materializarse y afrontar desde posiciones fuertes el periodo de recuperación.

El esfuerzo de los agentes de Oarsoaldea por revitalizar la comarca no han caído en saco roto, y recientemente el Gobierno Vasco anunció la aprobación de una partida adicional en su programa Berpiztu para las comarcas de 24 millones de euros destinados a esta zona guipuzcoana, que presenta fuertes vulnerabilidades en situaciones de crisis como la que se manifiesta en la actualidad.

La iniciativa del Ejecutivo de Iñigo Urkullu forma parte de un plan de choque diseñado en 2018 para reforzar a las comarcas vascas más degradadas que, además de Oarsoaldea, contempla a las vizcainas de Ezkerraldea-Meatzaldea y Enkarteberri, y a la alavesa de Aiara. En el caso guipuzcoano, a los casi 57 millones anteriores se asigna a Oarsoaldea 24 millones de euros adicionales en el periodo 2021-2023 para financiar proyectos que consoliden su recuperación.

Las actuaciones se han trabajado con la Diputación de Gipuzkoa y, de manera especial, con los ayuntamientos de esta zona prioritaria que en definitiva son los que mejor conocen la realidad de sus municipios y se concretan en siete proyectos considerados tractores del bienestar económico y social de esta comarca relacionados con diferentes ámbitos de actividad.

El Polo de Economía Azul Bahía Pasaia es uno de ellos, con el objetivo de configurar un polo tecnológico de referencia en el Cantábrico para el desarrollo de la economía azul, que engloba todas las actividades relacionadas con el mar. En colaboración con Azti y Tecnalia, aspira a conformar también un centro de empresas ligadas a productos y servicios de este ámbito.

Desde un punto de muy económico, las ayudas impulsarán el emprendimiento y la innovación. En relación con el primero, el plan de reactivación de Oarsoaldea plantea rehabilitar el edificio de las antiguas escuelas Agustinas de Errenteria y ampliar las instalaciones de Habian en Torrekua con la intención de potenciar el emprendizaje en oficios creativos, además de acondicionar locales vacíos en esta localidad para crear un barrio artesano en el casco histórico.

Respecto a la innovación, el plan recoge la creación de un centro público-privado de dinamización e innovación empresarial que congregue a fondos de inversión y socios empresariales, junto con el centro de formación profesional Teknika, para acelerar nuevas empresas innovadoras e implantar nuevas técnicas en las ya existentes. Del mismo modo, otra actuación incide en zonas industriales de la comarca que se encuentran degradadas, con el objetivo de regenerarlas.

Los siete proyectos que se impulsan desde Oarsoaldea y que recibirán el apoyo económico del Gobierno Vasco no tienen únicamente un carácter empresarial, sino que algunos plantean iniciativas con una deriva más social, en una zona de Gipuzkoa que también presenta carencias en este ámbito.

Por este motivo, la Diputación de Gipuzkoa ha presentado como proyecto estratégico el centro de envejecimiento activo Adinberri situado en Trintxerpe que ha concitado el interés del Gobierno Vasco. Prueba de ello es que lo incluye en el plan de choque con una dotación de seis millones de euros. La primera fase contempla la construcción de una nueva residencia con 130 plazas, 25 apartamentos tutelados, centro de día, locales de atención primaria y prestación de servicios sociales.

Otra iniciativa social es la generación de un Polo de Inserción Laboral a través de inversiones en las diferentes empresas de la comarca que trabajan en la formación o contratación de personas desfavorecidas o con discapacidades físicas.

Por último, la línea de 24 millones de euros adicionales destinada a Oarsoaldea apoyará un proyecto turístico que afectará a la vía verde de Arditurri, en cuyo entorno se pretende potenciar los equipamientos museísticos, además de actuar sobre el propio eje peatonal y ciclista para atraer a más visitantes.

Esta inyección económica por parte del Ejecutivo vasco servirá de revulsivo para materializar unos proyectos que permitirán a esta comarca guipuzcoana encontrar su espacio en el futuro económico del territorio y evitar así el riesgo de que la recuperación se produzca a dos velocidades. En Oarsoaldea viven 73.000 personas que constituyen el 10% de la población total de Gipuzkoa.

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millones de euros fue la inversión inicial del Gobierno Vasco en Oarsoaldea dentro del plan de choque de recuperación económica elaborado para los años 2018 y 2019, que ascendieron a 57 millones si se suman las asignaciones económicas de Lakua en esta zona al margen del plan.

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millones de euros es la cantidad adicional que el Ejecutivo vasco ha aprobado destinar a esta comarca guipuzcoana entre 2021 y 2023 tras los efectos de la pandemia de coronavirus.