- La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, afirmó ayer que la transición energética es “un reto y una oportunidad” que en Euskadi hay que “acelerar” y apostó por “avanzar” en el reto de la “energía verde generadora de puestos de trabajo y de competitividad”.

Arantxa Tapia participó, junto al consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, y el presidente del Grupo Ibereólica Renovables, Gregorio Álvarez, en el acto previo a la salida desde el Puerto de Bilbao, de nacelles de los 22 aerogeneradores SG 145, de 5 MW cada uno, que integran la segunda fase del parque eólico Cabo Leones III en Chile, que tendrá 110 MW de capacidad instalada y que es responsabilidad de ambas compañías vascas.

En su intervención en este acto simbólico, la consejera de Desarrollo Económico puso en “mayúscula y en negrita” la apuesta de Euskadi por la industria con unos servicios avanzados.

“Euskadi va a ser y su industria va a ser competitiva si somos capaces de estar presentes al máximo nivel, de exigirnos al máximo y de incorporar nuevos conceptos y tecnologías que nos permitan ser competitivos, como los somos hasta este momento”, remarcó.

Tras señalar que no hay “tiempo que perder” porque la transición energética “es una realidad, no es una moda, y algo que sí o sí va a transformar” la industria vasca y la va a hacer “más competitiva”, Tapia dijo que la transición energética es “un elemento más con el que tenemos que trabajar, un reto y una oportunidad” que en Euskadi hay que tratar de “acelerar” con la puesta en marcha de nuevos parques eólicos.

La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente reconoció que la dependencia energética de Euskadi en la actualidad es “muy grande”, por lo que señaló la necesidad de “avanzar y ser capaces de ser generadores de energía verde generadora de puestos de trabajo y de competitividad en Euskadi”.