- El brutal parón de la movilidad aérea por las restricciones y el miedo al contagio del COVID está teniendo un importante efecto negativo en la industria aeronáutica con una caída de la demanda de aviones sin precedentes. Ello obliga a las empresas vascas del sector a adoptar medidas duras de ajuste de costes para sobrevivir, y la última que ha puesto sobre la mesa la realización de un ERE ha sido Aernnova, que cuenta con su más importante factoría en Berantevilla (Álava).

La compañía vasca fabricante de estructuras Aernnova, siguiendo el proceso iniciado por otras firmas del sector como ITP Aero o Alciturri, contempla un ajuste laboral en su plantilla. La empresa prevé realizar un proceso de despido colectivo, mediante un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a un número de trabajadores todavía no definido.

Este es el mensaje que ha transmitido la dirección de la compañía alavesa al comité de empresa al que ha emplazado a una reunión para iniciar el proceso de negociaciones en un plazo de una semana.

La fuerte caída de la actividad en el sector, ya adelantada días pasadas en la asamblea anual del clúster aeronáutico vasco Hegan, obliga a Aernnova Aeroestructuras Álava a recortar su actividad productiva y a redimensionar a la baja su plantilla.