- Los efectos de la pandemia de coronavirus han reducido el tráfico aéreo un 50% y han llevado a las empresas del sector aeronáutico a una crisis notable, algo que las empresas del sector como Rolls-Royce, primer accionista de ITP Aero, notan en sus resultados, hasta el punto que el máximo dirigente del holding británico, Warren East, admitió ayer oficialmente que estaría dispuesto a vender su filial vasca, -cuyo 50% del negocio depende de Rolls-, junto con otros activos, para obtener unos 2.000 millones de libras, unos 2.200 millones de euros, con el fin de ayudar a paliar las pérdidas por importe de 5.378 millones de libras, unos 6.000 millones de euros, registradas en el primer semestre.

El CEO de Rolls-Royce, Warren East, reconoció públicamente que efectivamente habían puesto en el mercado a la compañía vasca: “Hemos identificado varios activos para su posible venta, incluido ITP Aero, y se está realizando el trabajo de preparación adecuado. También exploraremos opciones para aumentar el alcance de la cadena de suministro y las actividades de fabricación de ITP Aero. Independientemente del resultado, ITP Aero es un socio clave y mantendremos una relación a largo plazo con la empresa a través de nuestros programas de Defensa y Aeroespacial Civil”.

El pasado año, la compañía española Indra estuvo negociando tomar el control de ITP en una operación por la que valoraba el 51% de la firma vasca en unos 691 millones de euros.

Obviamente, en la actual coyuntura del sector, con perspectivas desfavorables para al menos dos o tres años más y con ajustes laborales por medio, será difícil mantener la valoración que se puso encima de la mesa el pasado año.

En todo caso, Rolls-Royce anunció ayer que, aunque las ventas de ITP habían caído en el primer semestre hasta unos 387 millones de euros, había logrado un beneficio operativo de 11,1 millones de euros que contrastaban con los números rojos del grupo británico.

ITP Aero sigue siendo una empresa de primer nivel que cerró 2019 con un beneficio neto de 95 millones de euros, un 37% más que en 2018, mientras que su facturación aumentó un 11% hasta los 983 millones. Por áreas de negocio, aviación comercial representaba el 75% de las ventas, mientras que Defensa aportaba el 14% y Soporte en Servicio, el 11%.