- Félix Garciandia, el presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia que ha puesto su cargo a disposición del Gobierno Vasco, considera que la clave para garantizar el futuro del puerto guipuzcoano se encuentra en potenciar su intermodalidad con el objetivo de facilitar al máximo el movimiento de mercancías que llegan o se dirigen a Europa.

El máximo responsable del recinto portuario reitera, en un comunicado que se hará público hoy y al que ha tenido acceso este periódico, que el Puerto de Pasaia es viable y un proyecto con futuro. No obstante, admite que su competitividad no puede basarse en la capacidad espacial, puesto que otras dársenas cercanas como la de Bilbao tienen mayor posibilidad de ampliar sus espacios.

“La ventaja competitiva” de Pasaia radica, según señala Garciandia, en “configurar un puerto ágil para el trabajo con los tráficos a y desde Europa”. En este sentido, aboga por potenciar los traslados en camión, tren y contenedores a través de la optimización de las infraestructuras por donde circulan.

Recuerda a este respecto que ya se han iniciado los trámites para la ampliación de la estación de Lezo-Errenteria, cuya finalización se prevé en 2021. Esta mejora se vería ampliada con las actuaciones pendientes de Adif en la estación de tren de Pasaia y con la adaptación de la vía al tercer hilo europeo.

Las infraestructuras viarias tendrán que ser completadas, en su opinión, con la mejora de las marítimas, y en este punto Garciandia subraya que ya se ha diseñado un proyecto por parte de la Autoridad Portuaria de Pasaia para flexibilizar las restricciones provocadas por la marea o la nocturnidad, además de proponer una “mejora radical” de la maniobrabilidad en todas las dársenas del puerto, al lograr que los buques con una eslora de 185 metros también puedan operar en el recinto.

El presidente del Puerto de Pasaia realiza estas reflexiones basadas en el “interés” que tiene la dársena y, para demostrarlo, recuerda que ha ampliado sus tráficos con las unidades de CAF, además de realizarse concesiones a Toro Betolaza y renovado las concesiones de Algeposa y UECC. Esta última empresa también construye tres buques de impacto medioambiental mínimo para que operen en Pasaia.

Mareógrafo. La instalación de este aparato de precisión mejora la maniobrabilidad al conocer el nivel exacto del agua por debajo de la quilla del barco.

Eslora. El Puerto de Pasaia ha aumentado a 150 metros la eslora máxima para trabajar sin restricciones.

Iluminación. Una vez finalizada la tramitación ambiental, la dársena guipuzcoana podrá iluminar su canal por la noche como si fuera una pista de aeropuerto.

Eficiencia energética. El puerto ha invertido un millón de euros en sustituir por led su alumbrado.

Vertidos. La conexión de los edificios pendientes a la red pública de Añarbe elimina el vertido de saneamiento a la bahía.

Mantenimiento. Firma de un convenio con el Ayuntamiento de Pasaia y el apoyo de la Diputación de Gipuzkoa para la conservación de los espacios portuarios.

“Nuestra ventaja competitiva no se puede basar en el espacio porque no lo tenemos”

Presidente del Puerto de Pasaia