- Plastigaur trabaja con polímeros que transforma en plástico para envases y embalaje industrial, una actividad que puede suscitar cierto recelo en una sociedad que identifica al plástico con contaminación. Sin embargo, su director general, Luis Artola, incide en que su proceso de producción es sensiblemente más respetuoso con el medio ambiente que el de otros materiales.

Esta empresa, además, es pionera en obtener certificados oficiales que acreditan su compromiso con la conservación natural como el Operation Clean Sweep en defensa del medio ambiente. Este tipo de reconocimientos premia una estrategia que la firma implantó hace muchos años, y que mantiene a pesar de la crisis provocada por el coronavirus.

“Pese a la terrible situación que hemos y estamos viviendo con el COVID-19, en Plastigaur no hemos parado los proyectos estratégicos que teníamos en marcha en el área de sostenibilidad”, sostiene su director general. Entre ellos, menciona que justo en plena pandemia lanzaron una nueva gama, Ekogaur, de envase y embalaje sostenible.

También han afianzado un trabajo de innovación que venían realizando desde hace unos años con el resultado de unos films con contenido de hasta un 50% de reciclado tras el consumo. “Incluso hemos logrado dos nuevas certificaciones en esta área”, añade Artola, que son la ISCC+ y la UNE-EN15343 de contenido reciclado posconsumo.

Junto con este constante interés por diseñar soluciones que protejan al medio ambiente, Plastigaur hoy día trabaja en otro importante proyecto, en esta ocasión relacionado más con la infraestructura que con su actividad como es la ampliación de sus instalaciones de Andoain.

“Actualmente estamos con un grave problema de espacio”, admite Artola. Sin embargo, llevar a cabo este proyecto no depende solo de la empresa. El polígono Illarramendi, donde hasta ahora solo se encontraba Plastigaur, ha iniciado unas obras para albergar más firmas, y su finalización dará paso a la ampliación de la empresa.