ELA apuesta por blindar el marco vasco de negociación en la reforma laboral de Sánchez

donostia - ELA busca meter una cuña en la minirreforma que prepara Pedro Sánchez en materia laboral. El sindicato ha trasladado a varios partidos, entre ellos PNV y EH Bildu, y al propio Gobierno socialista una propuesta “técnica y elaborada” para devolver la prioridad aplicativa a los convenios provinciales y autonómicos, que ayer plantearon el responsable de Negociación Colectiva del sindicato, Peio Igeregi, y la encargada de los servicios jurídicos de ELA, Amaia Aierbe.

En un encuentro informativo, los representantes de la central sindical vasca plantearon, de cara a la modificación de la reforma laboral, que la negociación sectorial provincial o, en su caso, autonómica, tenga prioridad aplicativa respecto a la negociación de empresa, salvo que ésta mejore las condiciones.

En este punto se dirigieron a los grupos políticos, especialmente a PNV y EH Bildu, para reclamar que defiendan esta posición y que bloqueen cambios que puedan suponer un mantenimiento de la estatalización.

Igeregi y Aierbe añadieron que ELA ya ha trasladado su propuesta de reforma a la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio y a distintos grupos (PSOE, Podemos, ERC, PDeCAT, PNV y EH Bildu), y que, según apuntaron, la ven “razonable”.

En la misma, ELA defiende que la estructura de la negociación colectiva debe responder a dos principios, el de mejora de condiciones de trabajo y el del sistema democrático, para que no haya ámbitos de negociación generales que “impidan la negociación a las mayorías representativas de otros ámbitos”.

Sus propuestas son que la negociación sectorial provincial o, en su caso, autonómica, tenga prioridad aplicativa respecto a la negociación de empresa, salvo que la negociación de empresa mejore las condiciones del convenio sectorial. En definitiva, reclama que cualquier ámbito inferior pueda mejorar un convenio.

Además, propone que los acuerdos interprofesionales prevalezcan sobre un acuerdo sectorial y el acuerdo autonómico, frente al estatal. Su planteamiento también contempla la desaparición de las materias reservadas al Estado para la negociación del artículo 84.4 del Estatuto de los Trabajadores, sobre todo la referida a jornada máxima anual, y que se pueda abrir un ámbito de negociación en cualquier momento.

Asimismo, defiende que el descuelgue del convenio debe ser “acordado en todos los casos” y que las empresas no tengan opción de aplicar modificaciones sustanciales de las condiciones para dejar de aplicar pactos suscritos por sindicatos y empresas. A estas peticiones une la de la desaparición del arbitraje obligatorio.

reformas laborales Los representantes de ELA hicieron un análisis de las reformas laborales de 2010 y 2011 del Gobierno Zapatero y la de 2012 del Ejecutivo de Rajoy que, a su juicio, deberían ser totalmente derogadas. A este respecto, subrayaron que el objetivo era la devaluación de las condiciones laborales y, en concreto, la salarial para lograr “una mano de obra barata”.

El sindicato recordó que se ha establecido un sistema polarizado entre negociación colectiva estatal y de empresa, mientras que la autonómica y provincial queda “supeditada a lo decidido en ámbitos superiores”.

En relación a la negociación en la empresa, señaló que, al tener prioridad aplicativa en materias como salario, horas extraordinarias u horarios, permite “empeorar” condiciones de los convenios sectoriales. Por su parte, la negociación colectiva estatal es, en opinión de ELA, un ámbito “puramente burocrático” que implementa “condiciones indignas”.

La central sindical abertzale destacó que la reforma laboral reservó para este ámbito materias que no se pueden negociar en otros y se “reservan más materias de lo que dice el artículo 84.4”. El sindicato indicó que en la práctica “a veces prohibe negociar en ámbitos inferiores” como el convenio provincial.

ELA valoró el acuerdo interprofesional firmado en 2017 por patronal y sindicatos vascos para otorgar preferencia aplicativa a los convenios firmados en Euskadi y advirtió de que ya hubo un intento por parte de la Federación Española de Asociaciones dedicadas a la Restauración Social de invalidarlo y persiste, en su opinión, la “amenaza” de que se pueda impugnar.

El sindicato aludió a las dificultades que se producen cuando hay “concurrencia” de diferentes acuerdos. En estos supuestos, caben distintas interpretaciones. Una de ellas, la del TSJPV que contempla que el primero que ocupe el espacio “prevalece frente a acuerdos posteriores”. La segunda, la de la prevalencia de los acuerdos inteprofesionales frente a acuerdos sectoriales. El sindicato precisó que una última interpretación es que prevalezcan los acuerdos estatales sobre los autonómicos.

Por lo tanto, aseguró que “no hay reglas de concurrencia clara” y que se debe superar “esa discusión” mediante una nueva reforma laboral que “blinde que aquí se pueda seguir negociando y con más libertad”. - E.P.