donostia - El Gobierno Vasco aprobó ayer una modificación de los Presupuestos de este año para pagar el próximo mes de noviembre el cuarto de la paga extra suprimida en 2012. Será el último paso para normalizar el abono de las pagas de sus funcionarios, que llevan cinco años cobrando en junio la extra de diciembre y en diciembre, la de junio del año posterior.

Para que cuadren los números ha sido necesario dividir en dos partes la paga de las próximas Navidades. La primera mitad se abonó en julio y la segunda se abonará en diciembre. De esta forma se consigue que casen los sucesivos adelantos de las extras con los cuatro pagos puntuales del 25% de la que fue suprimida por orden del Gobierno español en 2012.

El próximo año volverá la normalidad a la administración pública vasca y sus 70.000 trabajadores recibirán en su momento el sueldos que generan. El portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka, informó ayer de la aprobación del Proyecto de Ley que permitirá dar por concluido ese ciclo irregular en las relaciones salariales de Lakua.

Al tratarse de una Ley necesita pasar por el Parlamento y debe ser respaldado por la mayoría de la Cámara. No se esperan sobresaltos y se tramitará de forma urgente para no dilatar más el proceso, pero el secretario general de Gizalan, la Federación de Servicios Públicos de ELA, Igor Izagirre, recordó esa circunstancia en declaraciones a este diario.

“Es una tomadura de pelo que mientras otras administraciones, incluida la estatal, han recuperado ya toda la paga extra, nosotros estemos hablando de cómo nos la van a devolver, y que todavía haya que pasar por un trámite parlamentario”, lamentó Izagirre.

Por su parte, el Gobierno Vasco espera la “pronta aprobación” de la Ley de manera que pueda abonarse en noviembre esta cantidad al personal que trabaja en la Administración Pública Vasca. Erkoreka explicó que se abonará a los funcionarios actuales, y aquellas personas que ya no están en activo recibirán igualmente y de oficio la cantidad correspondiente, sin necesidad de reclamarla.