Síguenos en redes sociales:

El impuesto de la riqueza reformado recaudará 62.000 euros menos

El diputado de Hacienda considera que la afección es “neutra”La exención de las participaciones empresariales se amortiguará con una subida de tasas

El impuesto de la riqueza reformado recaudará 62.000 euros menos

donostia - La Hacienda Foral de Gipuzkoa ha cuantificado en 62.000 euros la cantidad que se dejará de recaudar tras la modificación del Impuesto sobre la Riqueza y las Grandes Fortunas, cuya medida más relevante es dejar exentas de triburar a las participaciones en empresas.

Así lo anunció ayer el diputado guipuzcoano de Hacienda y Finanzas, Jabier Larrañaga, durante su comparecencia voluntaria en Juntas Generales de Gipuzkoa para explicar a los grupos políticos en qué consistirán los cambios parciales que se aplicarán este año, a la espera de una reforma más profunda que se abordará a medio plazo.

Larrañaga subrayó la escasa incidencia que tendrá la modificación en el conjunto de lo recaudado, con una afección que calificó de “neutra” y que, según los cálculos realizados por su departamento, apenas superará los 60.000 euros de un montante total de más de cuatro millones de euros previstos.

El motivo principal de que la recaudación no se vea influída por esta medida es que la Hacienda guipuzcoana también va a incrementar los tramos y a subir las tarifas de este impuesto para amortiguar las posibles pérdidas.

De este modo, y como ejemplo, Jabier Larrañaga señaló que a los que declaren mayores patrimonios, superiores a seis millones de euros, se les aplicará una tasa del 1,5% frente al 1% anterior. Quienes tengan una base líquida imponible que oscile entre tres y seis millones de euros también verán incrementada su tasa al 1,30%, cuando antes cotizaban con un tipo del 1%.

Según estos cálculos, tras la exención de las participaciones en las empresas del Impuesto sobre la Riqueza y los Grandes Patrimonios se dejarán de percibir 964 declaraciones. Respecto a los contribuyentes, 2.690 pagarán más, 3.320 menos y otros 2.049 abonarán la misma cantidad.

Junto con la exención de participaciones empresariales y la modificación de tramos y tasas, la Diputación Foral de Gipuzkoa ha planteado un tercer cambio en este impuesto que consiste en tomar en cuenta únicamente el valor catastral en la declaración de bienes inmuebles. Hasta ahora se contemplaban tres valores, el catastral, el de adquisición y el calculado por Hacienda, y se escogía el más alto.

Con el cambio, el único valor a evaluar será el catastral, lo que fue contestado por representantes de EH Bildu y Podemos, al considerar que este concepto es el más bajo y, además, se encuentra desfasado. Larrañaga reconoció que no se han revisado los valores catastrales desde 2001, y avanzó que “contemplamos actualizarlos” para adaptarlos a los precios del mercado.

Sin embargo, defendió esta medida porque “además de facilitar las cosas, desaparecen los problemas de justicia tributaria horizontal que tiene el sistema en vigor, es decir, que bienes inmuebles similares tributen distinto”.

El diputado de Hacienda y Finanzas consideró que la reforma parcial del Impuesto sobre la Riqueza y las Grandes Fortunas permitirá eliminar “aquellos puntos que perjudican la promoción económica” por la que apuesta el plan de reactivación que impulsa la entidad foral, y que contempla como piedra angular la creación de empleo de calidad por parte de las empresas.

Tras recordar que la recaudación por esta figura es un 1,5% del total, señaló que a medio plazo se convertirá en Impuesto del Patrimonio, con la introducción de variaciones que no serán muy importantes para “armonizarnos con los otros dos territorios de la CAV”.