madrid - El Gobierno español de Mariano Rajoy no solo no ha controlado la deuda pública española sino que la ha disparado en esta legislatura. Mientras que en el periodo inicial de la actual crisis, 2007 a 2011, el Gobierno socialista de Zapatero aumentó la deuda pública del Estado en unos 300.000 millones de euros hasta cerrar 2011, con 621.000 millones, el Ejecutivo del PP ha elevado esa cantidad hasta los 1,046 billones de euros, unos 400.000 millones más.
Así no extraña que un informe de AFI, para Funcas, resalte que las administraciones públicas españolas han triplicado sus deudas financieras desde el inicio de la crisis, hasta superar la cifra del billón de euros, mientras que los particulares -las empresas y los hogares-, han logrado recortarla en más del 40% del producto interior bruto (PIB) español en este periodo.
El volumen de deuda total de España ha aumentado con la recesión al pasar del 253% del PIB a finales de 2007 a superar el 320% al cierre de 2014, pero con una clara diferencia: la Administración Pública concentra ahora el 40% del total, frente al 20% de 2007.
Dentro del proceso de ajuste del sector privado, el saneamiento ha sido más intenso en las empresas debido a la restricción crediticia, la premura por reducir la dependencia de la financiación ajena en un contexto de costes de financiación elevados, y la menor necesidad de recursos por la caída del volumen de negocio.
Todo esto ha hecho que la deuda empresarial se haya reducido en 30 puntos del PIB desde los máximos de 2010 hasta finales de 2014.
Por su parte, la deuda de los hogares ha caído en 14 puntos del PIB en el mismo periodo, un ritmo menor por el hecho de que esta deuda se materializa en préstamos hipotecarios a largo plazo y está en manos de hogares con restricciones significativas de renta.
El año pasado se moderó el ritmo de reducción del endeudamiento familiar, lo que está en consonancia con la recuperación del gasto en consumo, en un contexto de rentas salariales aún deprimidas, y la estabilización de la inversión en vivienda.
En cuanto a las administraciones públicas, el Gobierno central tenía una ratio de deuda del 84,2% del PIB a mediados de 2014, casi 55 puntos más que al inicio de la crisis, mientras que la deuda de las comunidades autónomas era del 21,7%, 16 puntos más que en 2007.
Según las previsiones que barajan los principales organismos internacionales, incluido el Fondo Monetario Internacional (FMI), 2017 será el año en el que la ratio de deuda pública de España podría empezar a descender. - N.G./Efe