Kutxabank cerrará 38 oficinas en el Estado y recolocará a 212 empleados
la clausura se debe a que las sucursales no han tenido el nivel de negocio previsto Treinta de las oficinas cerradas pertenecen a la red de Kutxa y Andalucía es la región más afectada con 12 locales
Donostia. Kutxabank va a cerrar antes del 1 de marzo un total de 38 oficinas de su red en el Estado, de las que 30 son de Kutxa, dentro de una reducción de su capacidad comercial al no generar los niveles de negocio previstos en esas sucursales, en aras a conseguir una mayor rentabilidad y eficiencia.
Esta reestructuración afectará a un total de 212 empleados que serán recolocados en otras oficinas de las cajas de donde procedían o trasladados a la CAV, donde se pueden producir el mayor número de prejubilaciones por la edad de los empleados, así como a sucursales próximas de las otras dos entidades que forman parte de Kutxabank, con lo que no se producirá ningún excedente, según manifestaron ayer a NOTICIAS DE GIPUZKOA, fuentes de la caja guipuzcoana.
De las 38 oficinas que se cerrarán el próximo mes de marzo, solo tres están destinadas al segmento de empresas y el resto se dedican a la banca minorista y no se debe a solapamientos con otras sucursales de las otras cajas de Kutxabank, sino a un puro criterio de eficiencia en el negocio, probablemente, porque la caja guipuzcoana fue una de las últimas entidades en acometer su expansión fuera de su territorio natural, lo que le obligó a actuar con cierta agresividad.
La zona donde más cierres de sucursales se va a producir, un total de doce, es Andalucía, de las que ocho son de Kutxa y cuatro de BBK. En la reestructuración se verán afectados un total de 65 empleados.
Kutxa clausurará tres oficinas en Sevilla, una de ellas de empresas, y una en Málaga, Córdoba y Granada, mientras que BBK cerrará una sucursal en Cádiz, Jerez, Almería y Motril.
La zona comprendida por Navarra, Aragón, La Rioja, Burgos, Cantabria, Asturias y Galicia es el segundo área con mayor número de cierres al totalizar once, de los que uno es de empresas, y todos ellos de sucursales pertenecientes a Kutxa. La operación afectará a un total de 58 empleados.
Curiosamente, en el territorio limítrofe de Navarra, donde Kutxa comenzó su expansión en el año 2007, la caja guipuzcoana prescindirá de cuatro oficinas, entre ellas, la que era su sede regional en el paseo de Sarasate de Pamplona, que estaba situada en el local del otrora famoso restaurante Las Pocholas. En el centro de la capital navarra se queda con el local de la avenida de Carlos III y cerrará las oficinas de varias localidades navarras como Estella, Tafalla y Peralta para quedarse solo con la de Tudela.
En Zaragoza, cierra dos oficinas, mientras que en Logroño, Santander, Gijón y Oviedo el recorte afectará a una sucursal por capital, a las que hay que añadir la oficina de empresas de Vigo.
Catalunya es la otra región donde se va a desarrollar también la reestructuración afectando a siete sucursales, todas ellas de Kutxa y a una plantilla de 38 trabajadores. En Barcelona, se cerrarán tres oficinas y una en Sabadell, Barberá del Vallés, a las que hay que sumar la sucursal de empresas en Granollers. En la provincia de Tarragona, el cierre afectará a la oficina de la localidad de Reus.
En lo que se refiere a Madrid, la clausura de oficinas está más repartido entre las tres entidades que conforman Kutxabank, ya que BBK y Kutxa contribuirán con dos cierres cada una, a la que hay que añadir la sucursal que prescindirá Vital. Aquí, el número de trabajadores afectados será de 27. En concreto, BBK, cerrará dos sucursales en la capital madrileña, mientras que la clausura afectará a una sucursal de Kutxa y otra de Vital. La caja guipuzcoana, asimismo, abandonará la localidad de Parla para reforzar su presencia en Fuenlabrada.
En lo que se refiere a la Comunidad Valenciana, la operación de desinversión de la red de oficinas significará la clausura de tres locales, de los que dos son de Kutxa y uno de BBK. Los empleados que tendrán que recolocarse serán 21. En concreto, la caja guipuzcoana abandonará las localidades de Burjassot y Manises, mientras que BBK cerrará un local en Valencia.
Por otra parte, Bildu volvió a reiterar sus dudas sobre la legalidad del consejo de administración de Kutxabank y aseguró que está estudiando las medidas a adoptar "en el caso de que se confirmen nuestras sospechas".
La reacción de Bildu tiene su origen en unas manifestaciones del presidente de Kutxabank, Mario Fernández, quien afirmó que no se va a producir una ampliación a 20 miembros del máximo órgano del banco, ya que la decisión corresponde a los consejos de administración de las cajas.
Más en Economía
-
Multa de hasta 250 euros por hacer un uso inadecuado del móvil en el transporte público
-
Astilleros Balenciaga de Zumaia alarga el ERTE para facilitar la entrada de inversores
-
Cuerpo recalca que la consulta pública sobre la opa del BBVA no es un referéndum
-
La recaudación en Gipuzkoa aumenta un 8,1% en los primeros cuatro meses