donostia. La consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, se defendió ayer de las duras críticas que a lo largo de la jornada le llovieron por parte de la práctica totalidad de las centrales sindicales, como consecuencia del recorte en ayudas sociales anunciado por el Gobierno Vasco en la presentación de los Presupuestos 2012. De este modo, Zabaleta afirmó que la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) vasca "seguirá siendo la más alta del Estado" pese a la rebaja del 7% prevista para el próximo año y señaló que "la solidaridad tiene que ser sostenible".
La consejera, que visitó el Ayuntamiento de Sestao para presentar un plan de empleo local, aseguró que "el sistema de Renta de Garantía de Ingresos, aún incluyendo una reducción en la cuantía personal del 7%, seguirá siendo la más alta del Estado y la que genera más derechos de todo el Estado". Recordó, además, que la RGI en Euskadi "se puede cobrar mientras duren las circunstancias en las que se encuentra esa persona, sin estar limitada en el tiempo. "No se cobra durante dos años como en otras comunidades, sino que uno puede percibirla durante el resto de la vida", dijo.
La consejera aseguró que "la solidaridad tiene que ser sostenible" y que "el sistema de prestaciones sociales lo tenemos que poder pagar los vascos porque si no estaremos generando un mayor problema" que "ajustar puntualmente, por este año", las "cuantías que vaya a percibir cada persona".
Además, destacó que "la partida de la Renta de Garantía siempre es ampliable porque es un derecho subjetivo" y "las personas se van incorporando al sistema y el sistema tiene que pagar esa prestación", como ha sucedido este año, en el que se presupuestaron 280 millones y se ampliarán en otros 60.
"El 40 % de todas las prestaciones sociales" de todo el Estado "son las que destinamos los vascos" y añadió que "nos vemos obligados a reducir todas las subvenciones, incluida esta, porque los recursos de los que dispone Euskadi son mucho menos de los que disponíamos".